Joya

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- ¿Por qué te quiero tanto?

Le preguntó a su senpai que estaba enfrascado en cosas del trabajo.

Morinaga pensó en voz alta. Suspiró fuerte. Se perdió en sus pensamientos. Sus ojos se llenaron de recuerdos. Su mente hizo un viaje demencial ocho años atrás en cuestión de segundos.

No entendía muy bien qué era ese motivo. <Excelente pregunta> pensó en silencio.

Souichi despegó su mirada de la pantalla, mordió un poco el cigarrillo que tenía entre sus labios, sostuvo fuertemente las hojas que estaba inspeccionando, un mechón de cabello resbaló cuando volteó al escuchar eso.

Morinaga tenía una cara de idiota, pero una diferente. Estaba perdido y sonrojado, mirando a la nada. En su mente seguía retumbando esa pregunta. El mismo Souichi no lo terminaba de comprender.

- No lo sé.

Dejó el papel sobre su laptop. Descansó la cabeza sobre el sofá y dibujó círculos con el humo.

- Tengo una carácter de mierda...

Souichi se unió a esos pensamientos en voz alta. Quiso hacer una lista positiva de sí misma, pero se dió cuenta que era el peor sujeto sobre la tierra.

- Te enojas muy rápido.

Enlistó Tetsuhiro, quien se sentó a su lado para seguir esa extraña y adorable lista.

- Soy pésimo en la cocina.

- Usas ropa arrugada.

- Soy impaciente.

- Eres distraído.

- Soy nada amigable.

- Eres grosero con la gente.

La lista se estaba poniendo un poco incómoda. Souichi lo sabía bastante bien.

- Te pego todo el tiempo

- Eres responsable

- Soy desordenado

Y así la lista de ambos continuó. La de Souichi llena de cosas terribles, la de Morinaga se empezó a llenar de cosas dulces.

- Eres muy cariñoso y tierno, senpai.

Souichi encendió otro cigarro cuando escuchó eso último.

- ¿Cariñoso yo?

De la larga  lista de cualidades que Morinaga le profesaba, no tuvo ningún problema hasta que tocó las que tienen que ver con sus sentimientos.

- Sí, lo eres a tu manera. Lo puedo ver cuándo estás con tus hermanos, esa capa de sobreprotección solo es cariño y amor disfrazado.

Tatsumi se perdió en el sabor de su cigarro. Se sonrojó al escuchar aquello.

- No lo soy.

- Sí, incluso conmigo. Creo que por eso te quiero tanto. Eres muy dulce.

- No lo soy.

- Eres el hombre más atento que he conocido.

Souichi decidió guardar silencio y dejar que el otro hablara. Quería escuchar cuántas cosas fantasiosas podía decir Morinaga.

- Eres bueno. Tienes un gran espíritu de bondad. Te gusta ayudar a la gente. No esperas nada a cambio, solamente lo haces porque lo ves como un deber. Porque es parte de ti. Eres bueno.

Eres humano, irónicamente lo eres, quien no te conociera como yo diría que es mentira -

- Y no lo es, todo eso es mentira.

- No, no es mentira. Es verdad. Yo lo veo, tienes un sentido de justicia muy fuerte. Haces lo que sea para que nadie sufra.

- Baah...

- Ojalá pudieras entender lo que yo veo en ti, senpai.

Souichi seguía fumando con los ojos cerrados, tratando de comprender todo ese extraño listado que Morinaga hacía de su persona.

- Me siento afortunado de ver todas esas facetas en ti.

Tetsuhiro sonrió y suspiró ahí mismo. Cerró los ojos y se relajó con la cercanía de Souichi.

- Mori, no creo que yo sea todo eso.

- Lo eres, eso y más. Creo que por eso te quiero tanto. ¿Ya te dije que amo tu mal humor? ... Tu personalidad es una joya.

- ¿Joya? No seas ridículo, Morinaga.

Tatsumi se burló un poco por la analogía de su compañero de junto.
Tetsuhiro por su parte cogió la mano de su amado y le regaló un tierno beso en el dorso.

- Lo eres senpai. Por eso te amo. Y quizá,por otras cosas más- regresó su mano a donde estaba.

Souichi jamás comprendería a Morinaga. Nunca entendería las razones por las que estaba enamorado. Lo que sí tenía claro es que estaba infinitamente agradecido por ser amado con ese nivel de locura.

- Quizá Senpai pueda ser capaz un día de decir por qué me ama...

Morinaga dijo eso sin esperar una respuesta. Siguió inmerso en sus pensamientos, sintiendo el rostro sonrojado de su novio , ni siquiera había necesidad de ver para saberlo.

- Eres tan tonto...

Y un agradable silencio se hizo entre los dos hombres. Souichi no paró de meditar, hasta que se animó a continuar.

- Es- eso sería lo-lo primero de la lista. Pero eso será otro día.

Lo dijo con palabras atropelladas. Lo dijo con pena. Lo dijo con las mejillas coloreadas de carmesí. Lo dijo con un cigarro casi evaporado.

Por su parte, Tetsuhiro no dijo nada. Ni lo miró. Solo disfrutó el momento. Sentirse amado es lo máximo.

Como senpai no pudo decir más, Souichi entrelazó tímidamente su mano con la de Tetsuhiro. Y juntos vieron el marchitar de la tarde haciéndose cosquillas entre los dedos. Sintiendo el calor del otro. Dando tiernos apretones en el pulgar del otro.

Un día, podría ser capaz de hacer esa lista completa. Mientras tanto ya había escrito en ella el primer motivo. Y esa fue una razón suficiente para Morinaga, porque conocía perfectamente el significado de " tonto"  para senpai.

No necesitaban más en ese momento para ser felices

Miss Book

Fue corto, porque fue momento  íntimo.

🖤


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