Fotosíntesis

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Llegar a casa en estos días me hace ilusión. El vacío y la frialdad de mi departamento han desaparecido. Ahora hay calidez y color, mi casa ha cobrado vida. Senpai vino a verme.

Aunque es por muy pocos días con eso me basta para estar feliz. Con su sola presencia me llena.

Senpai no puede estar totalmente inmóvil y fuera de su trabajo. Trajo su preciada laptop. Trabaja desde distancia.

Hoy me fui contento a trabajar porque sé que alguien me espera en casa. Soy más eficiente porque quiero llegar lo más pronto posible.

La vida entre los vagones pasa deprisa. Las conversaciones que antes escuchaba atentamente ahora son murmullos para mí, pues Souichi me está esperando.

Subo las escaleras del edificio con una visión. Encontrar a Senpai en mi sillón. Por cada paso que doy mi emoción crece más y más.

Al entrar siento el delicioso aroma de su colonia y de su tabaco. Lo primero que veo es su cabellera un poco desarreglada. Ese hilo rojo ya está un poco flojo.

Si estuviéramos en otros términos podría ir y jalarle el cabello para besarle. Pero valoro mi vida, entonces descarto la idea y controlo mis impulsos.

- Estoy en casa,Senpai.
- Bienvenido, Mori.

"Mori" cuando me llama así puedo percatarme de su buen humor.

- ¿En qué trabajas?

Dejé mi bolso por ahí y me acerqué a él aflojándome la corbata. Senpai estaba en pantalones chándal y una camisa blanca. El flequillo un poco alborotado pero su rostro totalmente apacible.

- Hago memorias.

Senpai estaba con los pies sobre el mueble. Con su libreta de anotaciones y un lápiz entre sus dedos.

- A ver.

Me dejé caer a su lado un tanto agotado, pero verlo así me recarga las energías.

- Aquí...

Observé lo que estaba haciendo y me asombró un poco. Hasta quedé con una manga del saco a medio quitar.

- Estás...estás... ¿ Dibujando una célula vegetal?

Sonreí al verlo fruncir un poco el ceño, quizá un poco avergonzado. No sabía que dibujaba.

- Si. A veces lo hago.

No me miró, solo siguió ensimismado en el aparato de Golgi.

- ¿Por qué una célula vegetal?

- Estaba haciendo memorias de mis razones por las que elegí esta carrera.

Senpai siguió dibujando cada línea de forma elegante.

- Estaba recordando mis raíces. Mi padre fue una buena influencia. Pero mi madre fue determinante. Alguna vez te conté que ella adoraba las flores.

Senpai ahora estaba ocupado con el retículo endoplasmático. No le gustó. Lo borró cuidadosamente. Lo intentó de nuevo.

- ... Entonces fuimos a los campos de arroz en Nagano... entonces ella investigó sobre los suelos. El crecimiento, la composición del suelo. En fin. Madre amaba todo lo que tenía que ver con la naturaleza.

Seguía detallando lentamente, haciendo sombras y punteando la zona.

- Recordé eso y me dieron ganas de leer desde cero. Leí un libro sobre la fotosíntesis.

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