One Shots • Marvel

96.-Steve Rogers

Titulo: Vacaciones en la playa

-No me gusta-dijiste viendo el diminuto traje de baño.

Estabas de compras con Natasha, gastando dinero a lo bestia con la justificación de que eran vacaciones.

-Lo amas-dijo tomándolo-Y lo llevarás.

-No me lo pondré.

-Claro que lo harás.

Tomaste el traje de baño entre tus manos y pensaste qué tal vez le darías una oportunidad.

Era la playa después de todo, no tenías que estresarte con tus inseguridades.

Cada quien regreso a su habitación y tardaste un poco más de lo normal mirándote al espejo.

El bikini era rojo, un color que le caía bien a casi todos pero aun no estabas segura sobre cuánto piel estabas mostrando. Apenas te cubría lo necesario y no estabas acostumbrada a eso.

Te diste la vuelta y viste tu hombro manchado con un moretón que te habías hecho entrenando, tu cabello lo cubría un poco pero no se veía muy bonito.

Suspiraste y te diste ánimos a ti misma, porque te veías bien.

Habían algunos defectos como en todo cuerpo pero no te veías mal.

Sonreíste y te sentiste segura de ti misma hasta que saliste y la primera persona conocida que encontraste fue Steve.

Estaba sentado solo bebiendo bajo la sombra de la sombrilla de una de las mesas frente al mar, llevaba un short con estampado de hojas verdes y no traía camisa.

Traía el cabello mojado y no te concentraste mucho en las gotas de agua que se resbalaban por su abdomen.

-Cap-dijiste tratando de sonar confiada.

Por primera vez su mirada fue directa a todo tu cuerpo y no a tu rostro, aun no te había visto asi.

No tenían ni un mes saliendo, además de que nadie más sabía. No querían que el trabajo interviniera en su relación.

Sentiste pena, él luciendo su perfecto cuerpo y tu apenas algo normal.

Respira.

Respira.

-____-dijo tartamudeando un poco.

Pensaste lo peor, él ya no te iba a querer.

-Luces muy bonita.

Soltaste un suspiro de alivio pero brincaste del susto cuando alguien gritó tu nombre a tus espaldas.

Era Sam quien venía acompañado de Natasha.

-Si los rumores son ciertos, hubieras traído a Adrian-dijo el moreno-Es un buen chico.

¿Adrián?

-Tráele algo de beber a Sam-dijiste divertida-El cerebro se le está deshidratando.

Ella soltó una risa pero te hizo caso en parte, fue por un par de cervezas a la barra.

Mientras tanto Steve estaba muy muy dentro de su cabeza regañándose a sí mismo por solo decirte bonita, había dejado de respirar cuando te vio, te veías espectacular y tuvo que contenerse a decirte todo lo que pensaba porque eran cosas inapropiadas que no podía dejar de pensar.

-¿Eso fue un si o un no? Porque me parece que ocultas algo.

Tu mirada se dirigió a Steve por instinto y Sam se dio cuenta que estaba muy callado.