Doyoung estaba muy feliz. El hecho de haber pasado toda la noche en vela con su vecino pese a que las palabras que fluyeron entre ellos hubieran sido realmente muy pocas, era algo que posiblemente se quedaría por siempre en su memoria y corazón.
Aunque las ojeras debajo de sus ojos oscuros eran prominentes, eso no fue molestia cuando acudió a la universidad. En su cabeza solo le inquietaba un pensamiento: que su vecino no hubiera descubierto que él era el chico de las cartas por haber salido a esa hora.
Sabía que con Tempête no le había logrado convencer, pero esperaba que Jaehyun creyera que había sido una simple coincidencia.
Estaba tan ido en sus pensamientos y a la vez tan dormido que no notó cuando la clase se estaba acabando hasta que la maestra había preguntado si algo no quedó claro con el tema que acababan de explicar.
Doyoung con algo de pena, preguntó y en ese instante toda su alegría se esfumó. Todos sus compañeros se le quedaron viendo como si él fuera un inmenso idiota, casi acusándolo con la mirada de ser un inmenso fastidio.
Su sonrisa inmediatamente desapareció.
«Tú eres una de las pocas cosas que hacen que siga queriendo existir. Y no sé si aquello sea romántico o preocupante.»
28. TACHER
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je te laisserai des mots ; jaedo
Romance«Te dejaré palabras debajo de tu puerta Debajo de la luna que canta Cerca del lugar por el cual pasan tus pies Escondidas en los agujeros del tiempo de invierno Y cuando estés solo por un instante... Bésame Cuando quieras Bésame, Jaehyun.» ___ Doyou...
