Suficiente (Rusmex) Terminada

Capítulo 13

-¿¡COMO QUE MI VUELO SE CANCELÓ CHINGADA MADRE!?-

-Así como lo oye apa, hay mucha lluvia y tendrá que tomar un vuelo con escalas, llegará a España o tal vez Francia y luego pacá- Dijo Durango.

México estaba en el asiento del copiloto junto a Rusia rumbo al aeropuerto, había llamado a la aerolínea para confirmar el vuelo, pero lo notificaron de que debido al estado del tiempo no podrían hacer el vuelo directo a México como estaba planeado y por ello llamó a sus hijos, quería saber que pasaba.

-Mta madre ¿Y ahora qué voy a hacer? ¿Me van a cobrar el otro fregado boleto o qué?-

-No jefe, ya arreglamos eso, uste no más no se me alebreste, además creo que va a viajar con tata España- Se escuchó claramente como sus hermanos de CDMX golpearon sus cabezas con sus palmas luego del comentario de su hermano, no tenían nada en contra de España pero sabían lo empalagoso que llegaba a ser.

-Wey ya... Pues si no hay de otra que sea lo que Dios quiera... Nos vemos en unas horas mijos, se me cuidan y ya saben que nada de fiestas sin mi chamacos que luego hacen y no invitan...- Del otro lado se escuchó un gran escándalo algunos reían otros se quejaban y algunos le daban el avión a su padre.

-Oiga papá, no es por molestarlo verdad, pero  de puritita casualidad ¿No estuvo por ahí Quebec?- Peguntó Puebla en un susurro aprovechando el barullo. 

-Se me cuida mija y se duermen temprano- México colgó la llamada sin responder a su niña, los quería mucho a todos y a sus niñas las cuidaba como el oro.

Mientras tanto Alemania y Chile se encontraban algo nerviosos en la parte de atrás. Chile miraba por la ventana evitando el contacto visual con el alemán y este jugaba nerviosamente con sus pulgares intentando pensar que podría decirle al chileno. 

Alemania levantó la mirada al espejo retrovisor para ver a los ojos del ruso casi suplicándole algún tipo de ayuda, este solo lo miró con una sonrisa animándolo a decir algo. Alemania entendió el mensaje y mientras México hablaba por teléfono él se acercó un poco a Chile.

-E-es hermosa ¿No? La ciudad aún de noche brilla más que el cielo- Dijo finalmente al ver como Chile observaba los letreros luminosos de Tokio.

-Si po, me recordai bastante a New York, incluso ese weón e reactivo, no se le acaba la pila al chico- Bueno parece que logró un buen inicio de conversación, el resto del viaje ambos hablaron de la vida nocturna en diferentes ciudades, dejando de lado un poco la incomodidad y volviendo el ambiente mas ameno.

Por parte de Rusia este estaba feliz por su amigo, por fin consiguió dejar los nervios de lado, de vez en cuando daba miradas al espejo retrovisor para ver a la futura parejita, según el, hablando divertidos. México notó desde el principio el apoyo no verbal que el ruso le daba a su amigo alemán y como esto le ayudó poco a poco a recuperar su confianza. No podía negar que eso le parecía muy tierno, ver como Rusia, uno de los países más serios, apoyaba a un amigo era algo conmovedor. De manera involuntaria México sonrío buscando que la mirada de Rusia y su sonrisa fueran dirigidas a el.

-Entonces... El gran domador de osos y heredero del poderoso URRS ¿Ahora es cupido? ¿Hay algo que no hagas grandote?- México lo decía en forma de broma, pero a Rusia le dio algo de vergüenza.

-Yo no sé de qué hablas...- Volvió a su expresión seria, sonrojado y con la vista fija al camino.

-Ay como eres payaso, te lo digo de buena manera hombre, lo que pasa es que siempre te ves así como ahorita, con cara de pocos amigos, seriecito y formalón. La verdad es chido verte feliz y solidario por tu amigo aquí atrás, ya quisiera yo que me dedicaran esa sonrisa tan hermosa que tienes compa- Mex lo dijo más por impulso que por coquetear, pero al darse cuenta de lo que dijo comenzó a reirse de manera nerviosa. -Jeje... Osea no es que me guste tu sonrisa, es decir, es linda y todo, pero no así, es decir, si linda pero no linda linda... Ay Diosito ¿Por qué me hiciste tan pendejo?-