Suficiente (Rusmex) Terminada

Capítulo 19

Luego de una buena corretiza, dejaron a los niños en sus casas, incluyendo a Anita.

-Hasta luego guapo, ya sabe, si quiere pareja para el baile aquí estoy- Dijo Ana despidiéndose del ruso.

-ADIOS- Dijo México llevándose de ahí a Rusia de la mano.

-Entonces... tu novio- Dijo Rusia en un tono algo burlón.

-¿mm?- Fue entonces cuando México se percató de la situación -¡Ay Dios! Perdóname Rusia, es que... Pues tu sabes, la chamaca que andaba con la hormona alborotada jeje- Se excuso el mexicano soltando la mano del ruso, esto no le agradó a Rusia, así que decidió jugar un poco.

-Ah si Ana ¿No? Es una chica realmente linda ¿Crees que quiera bailar conmigo esta noche?- Dijo Rusia haciendo enojar a México.

-Hm ¿Entonces por qué no mejor te vas con ella? Mira que esta re loquita por ti, ¡Orale a la verga pinche poste!- Dijo realmente enfadado México, empujó a Rusia y quiso salir corriendo, pero Rusia lo abrazó por atrás impidiendo que se fuera -¿Ora qué? No que te querías ir con tu super amiga Anita?- México quiso escaparse pero no podía, Rusia ya lo había levantado del piso.

-¿Acaso el gran México esta celoso por mi culpa?- Preguntó burlón el ruso.

-¡¿Quién dijo algo de celos?! Solo no me caen bien los postes pedófilos y horribles- Dijo aún enojado el mexicano.

-Que bueno- Rusia tomó impuso y levantó a México por los aires para hacer que quedaran frente a frente -Por que este poste solo quiere bailar contigo y con nadie más- México bien podría ser ahora China pues el rojo dominó la mayor parte de su rostro, pudieron seguir así un buen rato pero las campanas de la iglesia sonaron indicando que la hora de la fiesta se acercaba.

-Hablando de bailes mi tripalovsky ¡Córrele que se nos hace tarde! Hay que ir a casa para que descanses y te bañes que ya de chilla la ardilla re feo- Ambos rieron por la broma de México, aunque Rusia no entendió muy bien eso último. 

Se fueron directo a la casa de México donde ya algunos de sus hijos se habían retirado a sus respectivos territorios. Los únicos que se quedaron acompañando a México y Rusia fueron CDMX, Edo. Mex y Morelos. Cuando llegaron los tres chicos estaban jugando videojuegos, hace un buen rato que habían terminado de ordenar la casa y necesitaban descansar.

-Ah que bonitos se ven de huevones,espero que ya estén listos para la fiesta, que ya casi empieza la procesión y los quiero de monaguillos hoy eh- Dijo México entrando a la casa.

-JA ¡Si, sobre todo CDMX el más santo! Si es bien joto el cabrón- Dijo con burla Edo. Méx.

-A mucha honra pendejo, no como tu pinche closetero- Respondió CDMX.

-Ya tamos listos apa, no mas faltan usted y el poste- Dijo Morelos.

-¿Poste?- Preguntaron ambos metropolitanos volteando a ver al ruso.

-¡Madres!- Dijeron, pues no lo habían saludado debidamente y si no lo hacían seguro que su papá los castigaba más tarde.

-Buenas tardes señor Rusia, aquí CDMX pa servirle a usted y a Dios-

-Yo soy Estado de México, pa lo que se le ofrezca aquí tiene a su servilleta- 

-AY PERO QUE OFRECIDOS- Gritó Morelos burlándose de sus hermanos. Esto hizo reír a su padre desde la cocina y que sus hermanos comenzaran a perseguirlo.

-A ver a ver chamacos se me calman y se me sientan en la mesa que vamos a cenar- Dijo el patriarca.

-Pero ¿Qué no vamos a comer en la feria?- Preguntó CDMX.