Suficiente (Rusmex) Terminada

Capítulo18

La comida pasó rápido entre algunas historias y chistes que el mexicano contaba ayudado de las mujeres que los acompañaban. Realmente era sorprendente como México tenía una relación tan estrecha con sus vecinos, quienes lo consideraban casi como de la familia.

-Meh que no te impresione mi poste, aquí todo México es como una gran familia con sus altos y bajos, gordos y chaparros jeje- Dijo la mas joven de las mujeres ahí, quien recibió un zape de su madre.

-Que gordos ni que nada, ¡Orale! Mejor ayúdeme a recoger aquí que no tarda en llegar Lázaro con el pedido pa la fiesta- Regañó Doña Mari.

-¿Fiesta?- Preguntó Rusia, según él, la fiesta de día de muertos sería en unos meses y la celebración de la independencia también... ¿Qué podrían celebrar a mitad de año?

-Uyy mi compa, es que aquí en la colonia el fin de semana vamos a celebrar a San Pedrito Martir- Dijo Eliza levantando los trastes sucios.

-Se pone bien bonito, son como tres días de fiesta, en la mañana vamos a misa, luego aquí su servidora da de comer a los músicos y al presidente municipal- Dijo Doña Mari con orgullo.

-Pero no nada más a ellos, toda la colonia viene a comer de a grapa y se llena la calle de gente- Añadió emocionada Eliza.

-También los músicos, en agradecimiento, tocan unas hermosas canciones para que la gente pueda bailar después de comer- Dijo con calma y algo de nostalgia Doña Juana.

-Ay abuelita, a ver si este año me enseña a bailar así tan bonito como usted cuando tenía mi edad ¿Verdad que sí abuelita?- Eliza abrazó a su abuela queriendo convencerla.

-También se hacen juegos de pirotecnia, un baile, la feria llega con juegos mecánicos para los niños y también uno que otro para las parejitas eh- Dijo Doña Mari con una mirada pícara para ambas naciones. México se sonrojó, al igual de Rusia y ambos sonrieron con nervios.

-Je...je... EJEM Como verás mi Rusky- Comenzó a explicar México intentando desviar el tema -Aquí no solo existen las fiestas nacionales que todos ustedes conocen, esta celebración por ejemplo es meramente religiosa y solo la celebran algunos pueblos, también hay otro tipo de fiestas, la verdad es que nosotros podemos celebrar de todo un poco los 365 días del año. Por eso mis fiestas son las mejores, tengo mucha experiencia- Dijo con orgullo el mexicano.

-Y no será lo único en lo que tenga experiencia- Añadió Eliza recibiendo un zape de su mamá y otro por parte de México.

-¡YA NOS EXHIBISTE!- Rió la abuela, la verdad es que las ocurrencias de su nieta siempre la mantenían entretenida.

-Como te decía... Las fiestas aquí no solamente son para beber o echar relajo, aquí hay algo mucho más profundo en cada cosa- Continuó México.

-¿Como qué cosas?- Preguntó Rusia haciendo que los ojos de México brillaran.

-Ven te muestro. MUCHAS GRACIAS POR LA COMIDA DOÑA MARI, venimos más tarde a ver que se ofrece-

-Ándale mijo, diviértanse, pero ya saben que sin globos no hay fiesta- Gritó Doña Mari desde la cocina entre risas.

-Otra... SE NOTA QUE SON FAMILIA- Gritó avergonzado el mexicano.

Rusia solo reía por lo bajo, aunque entendía el doble sentido de esa frase, la cara de vergüenza y enojo del mexicano era muy divertida.

Caminaron un poco hasta que llegaron a la Plaza principal de la colonia, había mucho movimiento, algunos hombres adornaban, las mujeres ayudaban a hacer los adornos. Algunos jóvenes trepaban a los techos de las casas para poner los colgantes, las mujeres mayores hacían de todo un poco para no cansarse mucho, los niños corrían alegres seguidos de sus padres. Se notaba que preparaban algo grande.