Acá | Jojo's Bizarre Adventure |

🍒 Capítulo 23 🍒

Los tres dreamers se subieron al tren nocturno mientras se despedían de Keenan -el cual no pudo quedarse tranquilo viendo como ellos se irían solos, por lo que fue a dejarlos a la estación-. Paolo y Nestore ocuparon puestos seguidos. Allegria estaba adelante de ellos. Los tres se sentían preocupados por la situación, por lo que no pudieron dormir fácilmente. Hablaron apenas de algunas cosas allí.

Ni Nestore ni Allegria contaron lo sucedido en la sala de aislamiento acústico a Paolo. Sin embargo, cuando cruzaban miradas entre ellos dos, era una situación en la que no podían sonreírle o dedicarle una mirada compresiva al otro. Era tan extraño saber que aquella persona que observaban tenía los mismos sentimientos. Y aún así, ninguno de los dos quería dar el siguiente paso.

Habían pasado al rededor de dos horas cuando -por fin-, Allegria y Paolo se quedaron dormidos. Nestore seguía despierto y juegueteaba con los apéndices de su stand. Los tenía sobre sus dedos y los entrelazaba haciendo una especie de tejido con ellos. No podía dejar de pensar en lo que había pasado en la mañana. Estaba detrás de ella. Se veía indefensa y vulnerable. Extendió uno de los apéndices de su stand para alcanzarla. Quería sentir su calor para dormir a su lado, aunque sea a través de Hierophant Green. Quería saber cómo se sentía.

Hierophant se extendió y fue desarrollando su forma humanoide al lado de la alemana. Ella se movió un poco y se alejó algo asustado. Nestore no quería hacerla sentir incómoda. Su respiración era lenta y pausada, con unos leves y suaves ronquidos. Hierophant abrazó con suavidad el torso de ella. Nestore sintió que se iba a derretir. Sus mejillas ardían y su mandíbula temblaba de la emoción. Intentó calmarse y dormir, pero su cabeza seguía dándole vueltas al asunto. "Ella... Ella me ama" se repetía "Me ama..."

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-¡Por favor, Flavio, ten cuidado! -Insistió la rubia a su amigo.

-Lo sé, lo sé -El se acomodó la chaqueta de cuero café y las gafas de aviador. Franccesca lo miró con intranquilidad.

-No digas "lo sé, lo sé". Siempre dices lo mismo, y bueno -Ella suspiró-. La última vez que volaste te tuvieron que salvar unos extraños.

-Sí, sí, tienes razón. Pero esta vez voy para el norte. Tu sabes que allí estos tipos tiemblan al ver a los polis, no va a pasar nada -Él le dedicó una sonrisa tranquila a la rubia.

-Intentaré contactarte con mi pneuma -Franccesca le preparó una taza de café a Flavio. Él se la agradeció y comenzó a tomarla junto a un bocadillo.

-¿Esa es la habilidad de esa maraña de pinchos? ¿Ese es tu pneuma? -El Hombre Con Alas miró optimista a Franccesca.

-Sí, todavía estoy descubriéndolo. Pero por ahora sé que puedo hablar con él mentalmente y puedo ver a las personas a través de una "cámara invisible" -El pelinegro dio un silbido luego de tomar su café.