XVIII

1.7K 249 82
                                    

Allí se encontraban Felix y Minho mirando hacia el frente en silencio.

El padre del menor había subido las escaleras con rapidez, dejando a los dos menores en un silencio incómodo.

- Se suponía que llegaría a la noche... y son las seis de la tarde, perdón. - Habló rápidamente el menor mientras trazaba círculos en sus sienes con sus dedos.

- Creo que debería ir a mi casa. - Murmuró Minho al mismo tiempo que se paraba, se acomodó la ropa y estuvo dispuesto a comenzar a caminar hasta la puerta y marcharse, pero fue detenido por la mano del menor aferrandose a su brazo, impidiendole el paso.

-¿Estás enojado conmigo por esto?, en serio yo no sabía que mi padre llegaría más temprano que de costumbre y a mi en serio me gustó pasar tiempo contigo per-

El dedo indice del mayor terminó posicionandose por encima de los labios del rubio haciendo que no pudiera hablar. - No sé por qué piensas que estoy o debería estar enojado, solo me marcho porque la situación se estaba haciendo incómoda y porque ya debería estar en mi casa a esta hora, no estoy enojado contigo, tranquilo. -

Felix le sonrió aliviado, como si se hubiera sacado un peso de encima al haber escuchado las palabras del contrario. - Mis padres piensan que soy heterosexual o algo así, nunca traje a nadie a casa y ellos piensan que Dahyun es mi novia, realmente no tienen idea de que soy gay y ahora tengo miedo por lo que pueda llegar a decir. -

Minho tomó el mentón del menor para elevarlo y hacer que lo mirara fijamente. - Tienes mi número, si es que algo malo sucede puedes mandarme un mensaje, en realidad puedes mandar un mensaje cuando tu quieras, suelo quedarme despierto hasta tarde. -

El rubio asintió mientras se quedaba mirando los profundos ojos de su compañero hasta que su mirada se desvió a la nariz del otro chico, perdiéndose en el lunar que el chico tenía. - Tu lunar es bonito. - Confesó al mismo tiempo que lo tocaba con su dedo indice rápidamente.

- Tus labios son bonitos. - Habló Minho mientras llevaba su otra mano a la mejilla del menor como habían estado hace unos minutos atrás, pero ahora los dos estaban parados.

-¿Y que vas a hacer con eso?- Preguntó con descaro para luego ir acercándose más y más al mayor.

- Si tu padre no hubiera llegado me hubieras besado. - Dijo con naturalidad disfrutando ver a su dongsaeng sonrojado. - No te avergüences. -

- Mi padre puede bajar en cualquier momento, hyung. -

- Entonces tendrá que ser rápido. -

Felix estuvo apunto de preguntar a que se refería pero en cuestión de un segundo los labios del castaño se habían estampado contra los suyos.

Aquello se sentía tan bien, nunca había sentido ese tipo de sensaciones cuando había besado a otras personas.

Ambos movían sus labios lentamente, encajaban a la perfección.

El rubio no había tardado en pasar sus brazos por el cuello de Minho, atrayendolo hacia él lo más cerca posible.

Se sentía bien pero algunos recuerdos llegaron a su mente como siempre le solía pasar, intentó ignorarlo mientras succionaba el labio inferior del castaño.

Finalmente Minho se alejó de él mordiendo su labio con naturalidad, como si aquello fuera algo que hicieran todos los días.

Felix quedó confundido al ver tan tranquilo al mayor cuando todo en su interior estaba apunto de colapsar.

¡Realmente se habían besado!

Estaba tan feliz.

Quería besarlo una vez más, y luego otra, otra y posiblemente otra más.

Se había sentido tan bien y había sentido tantas cosas en un mismo segundo que no tenía palabras para describirlo.

El cosquilleo en su estomago había vuelto junto a las ganas de decirle a su hyung que no se fuera y se quedara a dormir junto a él.

- Tus labios saben a fresa, ¿eso es posible?- Preguntó el mayor con curiosidad mientras la sonreía al otro chico.

Exactamente en ese momento fue cuando Felix sintió que colapsaría.

- Bálsamo frutal. - Respondió intentado sonar lo más tranquilo posible.

- El miércoles mis padres tienen el día ocupado y no estarán en casa, deberías venir y podemos mirar algunas películas o alguna serie, ah, y ponte ese bálsamo, me gusta. - Habló.

-¿Estás suponiendo que vamos a volver a besarnos cuando vaya a tu casa?- Preguntó Felix con una ligera timidez al pensar en aquella situación, faltaban dos días aún pero él quería volver a besar a su hyung en este momento.

Minho le guiño un ojo para después depositar un casto beso en la mejilla del menor y finalmente comenzó a caminar hasta la puerta de la casa y salió de la propiedad con calma, dejando al contrario con los ojos abiertos.

Apenas dejó de ver al mayor soltó un chillido muy agudo y se tiró al sofá donde había estado acostado con Minho de un salto.

Se sentía tan eufórico y contento, no sabía por qué, solo quería ver a su hyung otra vez.

Quería volver a verlo y que volviera a abrazarlo.

Quería demasiadas cosas y todas se relacionaban con Minho.

Suspiró, se dio cuenta que no había pensado en todos sus problemas por un tiempo y frunció su ceño.

-¿Qué me está pasando?-



bad reputation» minlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora