bad reputation» minlix

XL

[ Felix POV. ]

Todo se veía algo nublado, intente fregar mis ojos con el dorso de mi mano, cuando lo hice sentí todo mi cuerpo adolorido.

Finalmente mi vista se enfocó y note como estaba en una habitación blanca, estaba en una camilla.

¿Qué hago aquí?

En cuanto quise enderezarme sentí aquel dolor insoportable en mi abdomen, lo toqué y note como es que estaba totalmente vendado, fruncí mi ceño.

-¿Cómo te sientes?- Escuché como un hombre entraba a la habitación, tenía esas vestimentas que los doctores tenían, si no era un doctor entonces podía confirmar que me encontraba realmente mal.

- Me siento muy cansado y quiero dormir mucho, físicamente el abdomen me duele demasiado y todos mis músculos me duelen, ¿qué fue lo qué pasó?- El doctor no tuvo que hablar porque al instante todos los recuerdos llegaron a mi y estoy seguro que palidecí. - Me refiero a si me dañe un órgano o algo así. -

- Afortunadamente no se ha dañado ningún órgano, la gran perdida de sangre se debe a la zona donde te lastimaron. La persona que lo hizo lo habrá hecho muy apurado o algo así, las puñaladas fueron rápidas y poco profundas, eso es algo bueno. Cuidaremos bien de la herida y dentro de unos días podrás salir de aquí, tienes suerte, a pasitos pequeños podrás volver a vivir tu vida con normalidad, solo quedará una cicatriz pero no creo que eso sea algo muy malo. - Terminó de hablarme el hombre con una sonrisa. - El dolor muscular se debe a que ayer estuviste demasiado tenso y nervioso haciendo que tus músculos se contraigan, por lo que ahora duelen.

Asentí y le sonreí al hombre. -¿Cuántos días estaré aquí, aproximadamente?-

- No creo que estés aquí una semana, quizás unos cinco días o algo así, tampoco es algo seguro, puedes pasar aquí más o menos días. - Respondió. -¿Crees que te sientas bien para recibir visitas?, hay unos chicos que están aquí desde que te trajo la ambulancia. -

- Si, no me molestaría tener visitas, pero, ¿en serio hay personas aquí?- El hombre asintió. - Bueno, que vengan. -

El doctor finalmente se fue y acomodé las cobijas encima mío, seguía siendo pleno otoño y hacía frío.

Realmente no podía creer lo que estaba pasando, ¿en serio había venido Jung Yoonoh a clavarme una botella?, sonaba como esas cosas que pasan en las películas, aunque en las películas la persona lastimada se levantaba y seguía con su vida, mientras que yo estoy acostado en una camilla haciendo puchero y con las cobijas hasta el cuello.

Recordaba perfectamente a Yoonoh levantando mi camiseta y manoseandome como si mi cuerpo fuera de su propiedad, aquel recuerdo hizo que mi piel se erizara y que tragara saliva, esta vez lo recordaba perfectamente, ya no como recuerdos borrosos.

También pensé en Wooyoung y todo lo que él había dicho.

No podía hablar de lo que había pasado, me convencí de que no hablaría de nada de lo que pasó y mucho menos se lo diría a alguien, ya había dado mi palabra, además de que tenía un enorme miedo a que le hicieran daño a alguien más.

-¿Lix?-

Dirigí mi mirada a la puerta y vi a Minho parado allí, le sonreí, era la única persona que necesitaba ver en este momento.

- Hola cariño. - Se acercó a la camilla y pude ver su rostro con claridad, se veía realmente mal. -¿Cómo te sientes?-

- Estoy muy cansado y me duele el cuerpo pero supongo que dentro de todo estoy bien. ¿Tu cómo estás?-

Minho sonrió débilmente y se paró al lado de la camilla, sentí su mano acariciando mi mejilla con suavidad. - Estoy preocupado, por todo en general, aunque ahora que veo que estás bien me siento mejor, tenía mucho miedo de que te pasara algo peor, es un alivio. -

-¿Por qué lloraste tanto?- Le pregunté sin más, tenía los ojos super hinchados y rojos, no quería verlo así, mucho menos si yo era el culpable.

- Todos nos preocupamos mucho por ti pequeño, pero ahora se que estás bien y que dentro de un tiempo estarás sano así que ya no importa, ¿si?- Respondió con tranquilidad. - El doctor que salió me dijo que te darían comida dentro de un rato así que debes sentarte con cuidado, debes tener mucha delicadeza con la herida. -

Lo miré e hice un pequeño puchero. - Me duele moverme, ¿me ayudas?-

Vi como asentía con una sonrisa y se acercaba un poco más, pasó sus brazos por debajo de mis brazos con cuidado de no tocar mi abdomen y me jaló hacia arriba con cuidado hasta hacer que quedara sentado.

- La idea era que me ayudes, no que me sentaras, me siento como un bebé. - Hablé con el ceño fruncido mientras veía a Minho sentándose en un borde de la camilla, a mi lado. - Hyung tu, ¿sabes algo de mis padres?, ayer me fui sin más a la noche y no quizás están buscandome o algo así. -

- Wooyoung los llamó varias veces y no contestan, también fuimos a tu casa varias veces pero no hay nadie. ¿Por qué preguntas?-

- Solo pensé que iban a preocuparse o algo así, no importa. -

- No puedo quedarme aquí mucho tiempo porque Wooyoung y Dahyun también están aquí y quieren verte, así que creo que es hora de irme. - Habló Minho al mismo tiempo que dejaba suaves caricias sobre mi cabello.

Se levantó de la camilla y comenzó a caminar hacia la puerta.

-¿Cuándo podrás volver?- Pregunte sin pensar en cómo sonaba aquello, haciendo que pareciera sumamente desesperado, aunque si lo estaba.

- Supongo que mañana, no puedo quedarme contigo porque no soy adulto y porque no estoy a cargo de ti. ¿Pasó algo?-

Me quedé mirándolo con un pequeño puchero, ya había hecho demasiados pucheros en muy poco tiempo. - Dame un abrazo, no podré verte hasta mañana.

Extendí mis brazos en su dirección y lo mire hasta que se acercó, correspondiendo el abrazo.

Quise abrazarlo con más fuerza pero sabía que me dolería por lo que solo me pegué a él con cariño queriendo quedarme de esa manera por mucho tiempo más, sabía que pasaría muchas horas solo y no quería eso, quería quedarme junto a Minho hasta tener que irme de este hospital.

En cuanto nos separamos quedamos mirándonos por unos segundos hasta que sentí un casto beso en los labios.

- No quiero que te vayas. - Confesé ignorando lo vergonozoso que había sonado eso.

- Vendré todos los días hasta que puedas salir de aquí, ¿si?, no vamos a dejar de vernos, tranquilo. -

- Voy a aburrirme. -

-¿Quieres que te traiga algún juego o algo así?- Preguntó con seriedad,  haciendo que me riera. -¿Qué?-

- Deja de tratarme como un bebé, ya tengo dieciséis años. -

Minho sonrió antes de depositar otro beso en mis labios. - Ya debo irme Lix, te amo. -

- Yo también, tonto, nos vemos mañana. - Le sonreí débilmente y vi como salía de la habitación, todo sería muy aburrido aquí.

Suspiré, ni siquiera me dieron tiempo a divagar por mis pensamientos cuando Dahyun y Wooyoung entraron a la habitación a abrazarme con rapidez sin decir ninguna palabra.

-¿Hola no?-