24: Tiempo terminado

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Disclaimer: MARVEL & Disney no me pertenecen. Esta historia si.

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En el capítulo anterior...


—Así es. —se sentó en el sofá al lado de su novia y comenzó a abrir el aluminio de su hamburguesa y le clavó un tremendo mordisco. Natasha también tomó la suya para empezar a almorzar—, por cierto Nat, —se dio vuelta y le pasó un sobre—, llegó correspondencia.

—¿Para mí? —ella recibió el sobre—, ¿y de qué es?

—No lo sé... pero está tu nombre. —le dio otra mordida a su hamburguesa sin tomarle mayor atención.

Natasha dejó su comida en el platillo y dio vuelta a la carta, la cual tenía un estampado del departamento de policía central de Moscú.

—«Mierda...»

Un frío recorrió su espalda al leer que se trataba de la policía. Su tiempo había terminado.

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Restaurante Горячий суп (Sopa Caliente)

Sharon, Wanda y James fueron a un local de comida que se había estrenado hace muy poco. Entraron y se sentaron en las mesas de afuera para aprovechar el día. Les pasaron la carta e inmediatamente ordenaron su almuerzo. No se demoraron demasiado en traérselos, ya que pidieron comidas que se suelen pedir a esta hora. Así que en menos de diez minutos ya estaban degustando sus platillos.

—Y bien... —los tres estaban en una mesa almorzando. Sharon lanzó el dardo de inmediato—, ¿cuando me iban a contar que estaban saliendo?

—¿Qué? —dijo Wanda sorprendida—, ¿de qué hablas? —preguntó haciéndose la desentendida.

—De verdad no me interesa que cosas vayan a hacer juntos. Lo que me preocupa realmente, es que no le pongan seguro a la puerta, ¿sabes? —arqueó una ceja burlona.

El rostro de Wanda se palideció por completo. Miró rápidamente a James y él asintió sin decir ninguna palabra.

—Nos... ¿nos viste? —preguntó mientras bebía un sorbo de su agua mineral.

—Si. Los vi follar hace un momento en tu oficina. Pero no se preocupen. El secreto está a salvo conmigo. Ahora entiendo por qué no me respondías a esas horas. Eres una zorra con todas sus letras. Me encanta...

—De hecho Wanda, Sharon se nos quedó viendo un buen rato. Estoy seguro que quería unirse a nosotros a pasar un buen momento... ¿un trío? —dicho esto, Wanda miró a su amiga.

—¿Ah si? te gustó lo que viste, que fetichista de mierda eres Carter. —le dio un bocado a su ensalada césar.

—Pues hace tiempo que yo no tengo acción y pues qué decirles, lo hacen bastante bien. Podrían hacer una porno juntos. Serían furor en internet. Y vamos, ¿a quien no le gusta ver porno? no nos mintamos entre nosotros.

—Es verdad... —dijo James que también cortaba su carne—, todos tenemos algo de suciedad en nuestras mentes. Somos humanos y tenemos necesidades.

—Aunque las de tu novia son bastante peculiares. Tener sexo en lugares públicos. —dijo la rubia con un tono burlón— Me lo pensaría sinceramente.

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