Disclaimer: MARVEL & Disney no me pertenecen.
Notas de la autora: Letra cursiva es flashback.
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En el capítulo anterior...
—Si claro. Por mi no hay problema. —respondió algo nervioso acompañándola hacia la puerta— Que descanses Sharon.
—Igualmente, Steve. —se acercó a él y depositó un beso en su mejilla— Buenas noches.
El muchacho cerró la puerta tras de sí y se sentó en el sofá. Su mente por alguna extraña razón estaba en blanco. No estaba procesando nada. De hecho aún le parecía extraño el haber invitado a Sharon a cenar. Su mente le decía que estaba mal, pero su corazón le ordenaba que debía hacer lo que sentía en el momento.
El debate entre lo racional y lo emocional siempre van de la mano. Aún así, la velada que tuvo fue bastante agradable. Sharon era una chica muy simpática y guapa. No es que se quiera dar una oportunidad con ella, pero de que quería conocerla un poco más era un hecho, ya que se había sentido muy relajado.
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Apartamento de María Hill.
Al día siguiente...
María se levantó temprano a preparar el desayuno. Estaba acostumbrada a hacerlo, ya que después salía a correr. Pero con su invitada en casa desistió de aquella idea.
Natasha seguía durmiendo, pero poco a poco comenzó a despertar por el olor delicioso de aquellos huevos revueltos con tocino. Se incorporó en su cama toda despeinada y aún con los ojos entrecerrados.
—Buenos días. —saludó María a su amiga mientras servía café recién molido— Despertaste justo a tiempo.
—Hmmmm —se talló los ojos para despertar— Buenos días...huele bien.
—Ve a darte una ducha para que despiertes. Luces horrenda. —terminó de decir haciendo que Natasha se levantara de golpe.
—Gracias amiga. Iré a sacarme la flojera interior. —abrió el armario de su amiga— ¿me prestas una toalla?
—Y la exterior también. —Natasha la fulminó con la mirada y María soltó una risa burlona— Si claro, saca la que quieras...
Tomó la toalla y se dirigió al baño. La ducha duró exactamente cinco minutos. Y es que Natasha a pesar de tener cercanía con su amiga, no le gustaba estar de allegada en un lugar, menos donde ella.
Salió arreglada con una tenida deportiva como le gustaba andar usualmente. Se acercó a la pequeña mesa donde María tenía servido el desayuno. Natasha dejó la toalla del cabello encima de la silla y tomó asiento. Tomó una tostada con huevo revuelto y le dio una mascada.
—Esto está muy bueno. —dijo ella.
—¿Steve no te hacía desayuno? —preguntó Hill sirviéndose otra taza de café.
—Si. Muchas veces. —le dio otra mordida a su pan— Era lo que mejor sabía hacer de hecho, pero este lo supera claramente.
—Eso lo dices porque estás dolida. Yo sé que en tu interior lo sigues amando y quieres que te perdone. —respondió su amiga y es que tal vez había algo de verdad en aquello.
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Pas de Deux
Novela JuvenilUniverso Alternativo: Una joven muchacha con deseos de ser la mejor bailarina de Rusia y un chico lleno de sueños, queriendo emprender en otro país. Sus vidas se terminarán uniendo pero... ¿lograrán estar juntos hasta la adversidad de las cosas? L...