Ella sonrió al ver que él había perdido.
A él no le importaba haber perdido, él solo veía su trasero sobre su erección.
Ella dejó la palanca sobre la cama e iba a levantarse pero él la tomó de la cadera.
__:Gané, suéltame.
C:Hiciste trampa... así que primero baja lo que levantaste.
__:Ese no era el trato.
C:No quiero hacerlo... solo muévete... por favor -ella soltó un suspiro-
__:¿Me dejas darme la vuelta, al menos?
Él soltó su cadera y ella se sentó pero ahora viéndolo a él.
Él puso sus manos en su trasero e hizo un poco de presión. Ella empezó a moverse con suavidad y puso sus manos en el pecho de Christopher.
Él podía ver sus senos a travéz de la delgada tela de la camiseta que era algo transparente, aunque su mirada fue al rostro de __. Ella empezó a moverse más rápido y él terminó sin siquiera haber sacado su miembro del boxer.
Soltó un gran suspiro y dejó de hacer presión con sus manos. Ella se levantó caminó hasta la puerta.
C:¿No vas a querer tu premio? -ella giró-
__:Primero cámbiate -salió de ahí y él sonrió-
Él se levantó, fue al baño y encendió la llave.
Quitó su ropa y se dió una ducha rápida. Salió y se puso un boxer y una pantaloneta.
Salió de la habitación y fue a la habitación de __.
C:¿Qué vas a querer de premio, preciosa? -la miró recostada en la cama-
__:Cocíname algo...
C:Podías elejir cualquier cosa y ¿elejiste lo que siempre hago por ti?
__:Yo te diré lo que cocines, tonto -él giró los ojos y sonrió-
C:Bueno, ¿Qué quieres?
__:Tacos -sonrió-
Él sonrió y salió de la habitación. Un poco después salió ella y lo vio cocinar.
A ella le encantaba lo que él hacía, nunca había provado ese tipo de sazón, era simplemente única.
C:No veas, es mi secreto -sacó un frasco-
Ella desvió la mirada por unos segundo y volvió a mirar.
Ella quedó fascinada con la facilidad de cocinar de él, ella con mucho esfuerzo podía hacer un plato de cereal con leche y él hacía maravillas.
Después de más o menos 45 minutos, él había terminado.
Había hecho varias salsas, carne y algunos acompañantes.
