Caminaron hasta una joyería tomados de la mano y ambos entraron.
C:Señor -sonrió-
×:Usted es uno de los pocos hombres que vuelve al escuchar el precio del anillo -dijo el hombre del mostrador algo sorprendido y con una sonrisa-
C:Bueno, le dije que volvería.
__:Señor -susurró- ¿Cuánto... cuánto cuesta?
×:Más de sei...
C:Señor, -lo interrumpió- no le diga el precio, por favor. Si se lo dice, no va a aceptarlo.
×:Pero el costo es muy alto, ¿Por qué no lo va a aceptar?
C:Ella no es igual a todas las que han entrado aquí, señor. Ella no me lo aceptaría porque como usted dijo, el costo es muy alto.
×:Mija -miró a __- aunque no le pueda decir el precio, permítame decirle que el hombre que usted tiene a su lado, la aprecia mucho -ella sonrió- mijo, -miró a Christopher- si ella es como usted dice, no la deje ir, -él sonrió y apretó la mano de __- mujeres como ella ya no quedan.El hombre empezó a buscar el anillo que Christopher le había dicho que quería para __.
__:¿Podemos irnos? Por favor -lo miró-
C:Espera un momento, hermosa.El hombre de edad, se dejó ver con una pequeña caja en su mano.
×:¿Efectivo o tarjeta? -sonrió-
C:Tarjeta -sacó una de sus tarjetas y se la dio-El señor le devolvió la tarjeta a los pocos minutos y le dio la caja.
C:Gracias -sonrió-
El señor les sonrió y ambos salieron de ahí.
Fueron al estacionamiento y se subieron en el carro.
Él empezó a manejar hasta que llegaron al departamento.
Él cogió todas las fundas y entraron.__:Chris... yo... -él dejó las fundas en el sofá y se acercó a ella-
C:No digas nada, __ -susurró contra sus labios y la tomó de la cintura-
__:Christopher, no tenías que...
C:-la interrumpió- Solo bésame, __... Con eso me pagarás todo.Ella subió sus manos al pecho de Christopher lentamente y tomó el cuello de la camiseta que él traía.
La jaló un poco y los labios de ambos chocaron.
Las manos de él viajaban por su cintura, su cadera y su espalda.
Se separaron lentamente y ella soltó la camiseta.C:¿Ves?... todo está pagado -sonrió-
__:Gracias, Christopher -se aferró a su pecho-
C:Te tengo dos sorpresas -ella lo miró- serían tres pero ya sabes que te compré un anillo, aunque aún tienes que verlo -sonrió-