Él salió de la habitación y luego de su departamento.
C:Prepara la sesión de entrenamiento.
Z:Si.
Él volvió a entrar al departamento y fue a la cocina. Terminó de cocinar y luego ambos desayunaron.
C:Vístete, saldremos a entrenar.
__:¿No puedo ir así?
C:Si todas las personas que están afuera fuesen mujeres hetero no tendría problema, pero son hombres con hormanas igual de alborotadas que las mías, así que deberás cambiarte.
Ella rodó los ojos y se levantó. Fue a la habitación y se cambió. Luego, ambos salieron del departamento y caminaron hacia el arena.
Había varias botellas de vidrio, algunas armas, había un material algo delgado con forma del torso y cabeza de un hombre y Zabdiel aún estaba acomodando las cosas.
Christopher tomó un arma y se acercó a ella.
C:Primero esta, es la más fácil de usar, lo que vas a hacer primero depende de la mano con la que la vayas a disparar -puso la pistola en su mano derecha- si la vas a disparar con la derecha, el arma debe estar alineada con ese brazo -extendió su brazo y lo dejó recto- tu dedo pulgar debe estar pegado a la culata, por debajo del percutor -puso su mano en esa posición-
__:Si... perdóname pero no sé que son esas cosas -él soltó una pequeña risa-
C:Tu solo mira como está mi mano, tu otra mano debe acompañar a la primera para mantener firme la posición, no para soportar el peso del arma -puso su otra mano- tus pies deben estar separados... más o menos a la altura de los hombros, tu pie más débil debe ir adelante -puso sus pies en esa posición- tu turno -se puso en posición normal y le dio la pistola-
Ella la tomó la pistola y se puso en la posición que él estaba mientras él la veía con atención.
Se puso atrás de ella y puso sus manos en sus cintura, ella movió sus manos al sentirlo y él la soltó.
C:No importa que pase, siempre -se puso frente a ella- debes tener la misma posición -ella puso la posición anterior- eso es -sonrió y tomó la pistola- ahora -ella se puso en posición normal- para poder apuntar, debes saber que tienes un ojo dominante y uno secundario -dejó el arma en la mesa- Zabdiel, trae el ejercicio para la visión.
Zabdiel llevó la cartulina y se paró frente a ella con algo de distancia.
C:Pon tus manos así -hizo una especie de cuadrado con sus manos dejando un espacio en el centro- y estira los brazos -ella lo hizo- alínealos con el punto rojo que está ahí -ella movió un poco sus brazos- cierra el ojo izquierdo -ella lo hizo- ¿ves el punto?
__:Si.
C:Ahora, ábrelo y cierra el ojo derecho -ella lo hizo- ¿Ahora ves el punto?
__:No.
C:Tu ojo dominante es el derecho, igual que el mío -sonrió-
