❝Esto no puede estar pasando... ¡Esto no puede estar pasando❞
❝Tranquilízate, May...❞
❝Tranquila la vecina, ¿Que mierda acaba de pasar?❞
Dónde la vida de Maya dió un giro de 360° al volver a Beacon Hills.
•••
▬Portada hecha por: @Vxnellope-
▬Teen Wo...
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—¡Maya Collins te quedas en esa cama o me conocerás enojada!
—Mamá...
—No, no voy a seguir escuchándote. Soy tu madre y tú me escucharás a mi —ordena—. Acuéstese, ahora.
Maya, ordena con rapidez y bufa queriendo no ver sus ojos.
—No pensaba que podías hipnotizarme.
—Hay muchas cosas que todavía no sabes —Carmen suspira—. Maya, casi mueres... otra vez, lo que te inyectó la Darach ésta vez fue algo más. Una mezcla de muérdago con algo más que no sabemos. Tuvimos que reanimarte. ¿Sabes cómo eso me hace sentir? Casi mueres en ésta cama.
El corazón de Maya se rompe al ver a su madre llorando.
—Mamá...
—Cariño, no puedo perderte —Carmen se acerca a ella llevando sus manos a sus mejillas—. No puedo perderte a ti también. Se que quieres ayudar a tus amigos y a los demás, pero no puedes olvidarte de preocuparte por ti misma.
—Cuando finalizó el verano y volvimos a Beacon, me prometí que nadie más saldría lastimado.
—Debes añadirte a esa promesa.
—¿Cómo está Lydia? —cambia de tema.
—Bien, algunos moretones en el cuello y una leve herida en la frente, pero ya la llevaron a un hospital en el centro por la evacuación.
—Esta bien. Debes ayudar a otros estaré bien.
—No, se que si salgo de esta habitación te irás de aquí
—Tengo que ayudarlos.
—¡Tienes que recuperarte!
—¡No quiero que nadie más muera! —exclama furiosa—. ¡Se llevó a Noah! ¡Se lo llevó, mamá! —solloza cubriendo su rostro—. Se lo llevó y no pude hacer nada por eso. Tengo que estar con Stiles, con Scott, tengo que ayudarlos. Mamá... tengo que hacerlo —comienza a llorar, sintiéndose devastada.
—Maya... tienes que entender que ahora no puedes hacer nada en tu estado, estás débil, no puedes sostener tu propio peso, tienes que estar aquí. Se que ellos lo entenderán.
—Lo se, porque son los mejores amigos que pude haber pedido, la que no entiende y la que no quiere entender soy yo —la mira—. Tienes que entenderme, tú salvas personas todo el tiempo. Se que no deseas perder a ninguno de tus pacientes. Me pasa lo mismo a mi.
—huh, permiso —Melissa entra a la habitación y mira a Maya con una sonrisa—. ¿Cómo estás, cielo?
—Con ganas de irme.
Melissa mira a Carmen y luego a Maya.
—¿Que pasa, Meli?
—Hay algo que supe y pensé que querrías saber —mira a Maya y ella la mira confundida—. Cora Hale todavía sigue en el hospital.
