❝Esto no puede estar pasando... ¡Esto no puede estar pasando❞
❝Tranquilízate, May...❞
❝Tranquila la vecina, ¿Que mierda acaba de pasar?❞
Dónde la vida de Maya dió un giro de 360° al volver a Beacon Hills.
•••
▬Portada hecha por: @Vxnellope-
▬Teen Wo...
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—¿Estás bien?
—¿Cuántas veces tengo que decirlo?
—Hasta que esté completamente segura de que estás bien.
—Estoy bien, Maya.
Ella escucha la bocina de la moto de Scott y suspira.
—Llegaron por mi. Te veo en la escuela donde te preguntaré otra vez como estás.
—Estás loca —Lydia ríe.
—Y así me amas, nos vemos.
—Adiós, loca.
—¡Maya, llegaron por ti!
—¡Lo sé, ya bajo!
Maya toma su mochila, verificando que tenga todo y sale de su habitación, bajando las escaleras.
—Me voy, mamá —anuncia dirigiéndose a la entrada.
—Espera, te olvidas de algo.
Voltea a ver a su madre y abre sus ojos sorprendida al ver cómo uno de sus libros se dirige hacia ella volando. Lo toma en el aire y mira a su madre que sonríe.
—¿Puedes mover cosas con tu mente? —Carmen asiente—. ¿Cómo es que no sabía ésto? Algún día tendrás que contarme todo, mamá. ¿Por qué sigues con los secretos?
—No son secretos, son... —Carmen se acerca a su hija y acomoda su cabello—. Solo quiero esperar a que estés verdaderamente lista.
—¿Y cuando lo estaré?
—Tu sabrás cuando —sonríe.
—Bueno, no puedo esperar a que llegue ese momento. Necesito saber algo ahora.
—¿Que cosa?
—¿Cómo es que no pude controlar a esas criaturas que salen por las noches? —pregunta con seriedad.
Maya le había contado todo a su madre sobre la pelea con las criaturas, pero lo que mas le preocupa es que ella no pudo controlarlas, tuvo que usar mucha fuerza para hacerlo durante unos segundos.
—Si lo supiera te diría, cariño. Pero no sé la respuesta —Maya suspira y asiente—. Scott está esperándote, ten un buen día —besa su frente.
—Tu también.
—Y no te metas en líos.
—¿Con Scott y Stiles de amigos? Mamá, por favor —sonríe divertida caminando a la puerta—. Nos vemos en la noche.
—No te olvides que llegaré temprano, así tendremos una noche de madre e hija.
—Mi sueño al fin se cumple —le lanza un beso a su madre y sale de la casa viendo a su mejor amigo encima de la moto—. Perdón por la tardanza —sube a la moto, poniéndose el casco.
