Capitulo 15

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Los días pasaban, y no era fácil ser el premio anual, seguir siendo un estudiante modelo, controlar a su hermana de que se vaya por ahí con cualquiera y pensar en sus planes, todo eso le estresaba y todos lo notaban, en especial Roxana que se le acercó con cautela.

— ¿todo bien Tom?– preguntó sentándose junto a él en la sala común.

— estoy estresado por todo, Amelia no pone de su parte y tampoco los mocosos de primer año, los EXTASIS son pronto... – soltó frotándose los ojos.

— sabes que siempre te puedo ayudar en eso– dijo con picardia– y sabes a que me refiero.

Tom miró la sala común, estaba prácticamente bacia, había muy pocos haciendo sus trabajos, regresó su vista a la pelirroja, ya iba mucho desde su último encuentro y si que lo necesitaba— pero ahora ya estas comprometida, ¿eso no te importa?

— la verdad no, tengo que disfrutar mis últimos días siendo libre, y que mejor que contigo– se puso de pie sin dejarle de ver– ¿vamos?

Tom se puso de pie y ambos subieron a la habitación del él, a la cual cerraron y silenciaron para que nadie los molestara. Cuando se volteo a verla ella lo envolvió rápidamente y le atrapó con un beso. Las manos de la pelirroja se movían con sigilo y celeridad, quitándole la camisa y dejándole con él pecho descubierto.

Roxana le giaba, le había dado permiso de tocarlo, de besarlo, algo que había deseado desde su cuarto año y que cualquiera deseaba y ahora ella podía hacerlo, desde el comienzo de ese año lo había conseguido y todo gracias a Amelia.

El pelinegro levantó a Roxana dejándola con fiereza sobre la cama, posando se sobre ella y observándole como una presa a punto de ser devorada. Los ojos de Roxana se pasearon por el cuerpo de Tom que respiraba agitado mientras que apuntaba al abdomen de ella con la varita para luego comenzar a subirle la falda y desabogonando la camisa que tan divinamente mostraba sus pechos.

Para sorpresa de Tom, Roxana le tomó con fuerza y logró posarse sobre él, desabrochando sus pantalones y dejandole sólo en ropa interior, una que no contenía para nada la excitacion de su miembro. La pelirroja le beso con lujuria mientras soltaba pequeños gemidos ente el contacto que tenía con suaves movimientos que daba sobre él. El gruñido ronco de Tom y sus manos pellizcando sus senos, le demostró la impaciencia del hombre quien dejó su boca y comenzó a recorrer su cuello entre besos.

Roxana soltó un gemido fuerte cuando el pelinegro metió uno de sus pecho en su boca, acariciandole con la lengua y desatando pequeños cosquilleos en toda la lengua. Ella casi no de dio cuenta de cuán rápido la embistió hasta que Tom comenzó a moverse debajo de ella con roncos gemidos y una mirada que le traspasaba sensualmente. La pelirroja prendió la fuerza para mentenerse erguida y se arrojó sobre el cuerpo del hombre mientras trataba de seguirle el ritmo. Tom le tenía agarrada de la cintura y se mordía el labio de una manera que causó a Roxana una debilidad en sus piernas.

Ella gemia en su oído y tenía sus uñas clavadas en sus hombros. El calor del cuerpo de Roxana y la forma en que se movía, le tenía aprisionado en un delicioso delirio donde podía más su deseo que la razón.

— Tom....– gimió casi sin fuerza– no puedo....no puedo más....

Él comenzó a moverse aún más rápido sintiendo como Roxana comenzaba a gemir y temblar sin control sobre él, ella se dejó ir entre gritos de placer mientras él solo le embestia con fuerza. Tom hundió su rostro en el hombro de Roxana mientras aceleraba, ya casi podía sentir aquella sensación de estar a punto de desvanecerse.

La respiración agitada y la pequeña risita de Roxana, le hicieron volver en razón. Ella ahora le observaba con el cabello despeinado y una ceja enmarcada. Iba a decir algo cuando escucharon que tocaban la puerta.

— ¡Tom! ¡Necesito hablar contigo! ¡Espero que ya hayas terminado con Rox!– la voz de Amelia se escuchaba un poco amortiguada– ¡te espero en la sala!

Roxana se sonrojo y Tom solo negó con la cabeza, ambos comenzaron a vestirse.

— bien, nos vemos despues– se despidió la pelirroja saliendo de la habitación. Al llegar a la sala se encontró con la mirada de Amelia.

𝙇𝙤𝙨 𝙃𝙚𝙧𝙚𝙙𝙚𝙧𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙎𝙡𝙮𝙩𝙝𝙚𝙧𝙞𝙣 ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora