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—¿C-Cómo?—no sabía cómo había logrado hablar, no entendía nada de lo que estaba pasando. Cómo podía ser que Manu sea el hombre que la seguía, no era posible.

—Caro, te lo juro. Es el.

—¿Pero como sabes?—preguntó aterrorizada por pensar que todo este tiempo, ella quizás estaba junto a un loco obsesionado por ella.

—Viste el día que salió una foto donde te sentías mal y caías en sus brazos.—Carolina asintió—Bueno, ese día yo vi la foto, y ¿no te acuerdas también que un día estuve con vos en el hotel y hasta el me había golpeado?—Carolina asintió de nuevo—Carolina, ese día le vi la cara. Y tenía la misma cara que en esa foto.

Carolina se levantó y frotó su cara, no podía ser que Manu, el chico en el cual confió eses últimos tiempos era el psicópata que le hacía tanto miedo. Pero Carolina se puso a pensar, y todo tenía sentido, ella dejó de sentir miradas acosadoras cuando estaba junto a él. Y si no las sentía más, era porqué era el...

—Caro, lo tenias que saber. Y menos mal que el ni te tocó.—ella volteó a mirar Agustin.

—¿Como... Como hiciste para recordarte de todo?

—Por esa foto que tenías en el celu. ¿Viste el día de mi accidente? Ya sé porqué estaba alterado, fue porqué vi la foto donde el aparecía y me di cuenta que era el, y que estaba demasiado cerca de ti. Nunca imaginé que sería tu novio.—lo último lo dijo tan bajito que Caro tuvo que concentrarse para entender que había dicho. Ella se acercó a el y se sentó a su lado.

—Yo realmente no lo puedo creer, es demasiada emoción. El me hizo confiar en el, me hizo pensar que podía funcionar, y es un loco. ¿Como pude ser tan estupida?—Agustin tomó las manos de Carolina y las acarició.

—Tranquila, ahora estoy con vos y no te va a pasar nada. Y mira nuestro bebé.—tocó su panza—Ahora tenemos que pensar solo en el.

Carolina asintió y puso su mano sobre la de Agustin.—Es que, el día que terminé todo con el, el me dijo que se iba, no tengo idea adonde. Quizás supo que lo sabías y se fue...

—Menos mal. Era un loco obsesivo no entiendo porqué hizo todo esto.—frotó su cara.

—Ahora entiendo todo, porqué me hablo desde el primer día que llegué al hotel. El tenía todo planeado.

—Hasta las fotos con Agustina, fue el quien te las dio.

Carolina miró asombrada a Agustin, se había separado del por causa de esas fotos que fueron entregadas de parte de su peor enemigo ahora. Todo tenía un sentido.

—El sabía que tenía que hacer, es demasiado loco.—ahora entro preocupación en la cabeza de Carolina y Agustin. ¿Qué podía pasar ahora? Tenían que hacer mucho cuidado porqué ahora la chica estaba embarazada y quien sabe que podría hacer Manu.

(...)

Carolina y Agustin estaban abrazados sobre el sillón, disfrutaban de eses momentos como nunca ahora. Sabían que dentro de 7 meses, un pequeño iría a cambiar sus planes a toda hora. Y no es que les molestaba pero, tenían consciencia de eso y por eso querían disfrutar de sus momentos juntos.

—¿Caro?—la chica volteó su cara hacía Agustin.

—¿No quieres que vayamos a comprar unas cositas para el bebé?—tocó la panza de Caro.

Una gran sonrisa apareció en la cara de la morocha, era todo lo que quería, irse a comprar pijamas, peluches para su bebé junto a Agustin. Hace un tiempo pensaba que todo esto lo tendría que hacer sola pero no, la vida le puso a Agustin de nuevo en su camino.

—Obvio que quiero, pero ¿vas a poder caminar?—Agustin se levantó y empezó a caminar despacio con la ayuda de Carolina.

—Mira, hasta puedo ir sin muletas, solo tendrás que estar a mi lado.—Carolina sonrió y besó los labios de Agustin.

—Creo que fue la buena noticia que te puso así.—dijo en sus brazos. El asintió y lo escuchó reírse.

(...)

Estaban en el centro comercial cuando entraron en una tienda para bebés. Agustin recordó el día que había hecho una seña con la mirada a Carolina para que ella entiende que quería un bebé. Y ahora lo tendría, era increíble las vueltas que daba la vida.

Cuando entraron querían comprar todo lo que había, Carolina se reía viendo como Agustin le preguntaba cómo pondrían eses pequeños pantalones en un bebé. Claramente necesitaba clases antes de que el bebé nazca. Al final, por más raro que podría ser, Agustin parecía ser el que más quería comprar peluches, ropa para el bebé. Carolina lo miró por un segundo y se sintió culpable de no haberle dicho antes, se veía tan feliz ahora con un peluche en sus manos sonriendo viendo todo lo que le rodeaba.

—Agus, estoy tan feliz.—dijo acercándose a sus labios.

El le dio un beso luego que se acercó y tocó su panza. Miró por encima del hombro de Carolina y vio como hubo un flash.

—Bueno, ojalá no te molesta pero ahora todos van a saber que estas embarazada.—dijo y Carolina se volteó y vio como un hombre bajito corría por otro lado para no ser visto o para esconderse mejor. Un paparazzi, ya se habían acostumbrado pero les molestaba que en este caso era realmente vida privada porqué se trataba de su hijo.

—Ya nada me hará molestar ni nada Agus. Lo único que me importa es que seamos felices y que nuestro bebé nazca bien. Yo quería contarles a todos cuando cumplía 3 meses porqué es ahí que hay menos riesgos con el embarazo pero bueno.

—Bueno, vamos a pagar todo y regresamos a casa tranquilos ¿si?—Carolina asintió y el besó su frente.

Ellos no iban a dejar que nada ni nadie les arruine su felicidad.

Sam🌸

Carolina (1T) | Aguslina [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora