Tensión

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Poder ver su expresión, era impagable. Evan parecía estar a punto de desmayarse, se veía terrible. Era bastante seguro de que no se esperaba algo así. Había dado un golpe certero.

- Tu nombre me suena – le dijo Bruno como intentando recordar algo – creo que Cris te mencionó en algún momento

Evan sonrió con falsedad e incomodidad.

- Solíamos ser amigos... A mí tu nombre no me suena para nada – se defendió

Nadie se la creyó.

- Te lo mencioné el otro día – le recordó Eli – en la playa, él es amigo y entrenador de Cris

- Aaah... El brasileño ¿no?

- El mismo

Al verlos juntos, uno frente al otro, me daba cuenta de muchas cosas. Primero, que esto parecía una película. Segundo, que llegado cierto nivel de tensión, de verdad se podía palpar. Tercero, que esperaba que nunca se pelearan, porque Bruno podía romperle los dientes a Evan. Y cuarto, a estas alturas, luego de todo lo que había pasado, ya no me podía ni imaginar lo que pasaría de ahora en adelante.

- Estoy muy feliz de que estés aquí – le dijo Eli a Bruno con cariño – cuando estuve en Brasil, me la pasé increíble contigo y Cris

- Espero que esta vez no sea diferente

- Yo creo que nuestro nuevo amigo ya nos está haciendo pasar un buen rato – comentó Sam con malicia

Moví la cabeza e intenté contener la risa.

- Nós já ganhamos – me susurró Bruno en portugués

Me decía que ya habíamos ganado. Lo decía con orgullo.

- Eli nos comentó un montón de cosas buenas sobre ti – habló Becky

Se había mantenido en silencio por unos minutos, observando la escena al igual que el resto de nosotros.

- Nos dijo que habías hecho que Cris ganara campeonatos de boxeo – dijo Félix

- Yo no la hice ganar, ella lo hizo a punta de esfuerzo, es todo mérito de ella

Me gustaba escucharlo hablar de mí. Nos sentamos en el sofá. Miré de reojo a Evan, seguía pálido y con cara de estar descompuesto. No se quiso sentar.

- ¿Es buena alumna o te desobedece en todo? – le preguntó Patrick - porque ya sabemos lo irreverente que cierta persona puede ser

- Un poco de esto, un poco de aquello – respondió entre risas – al principio era más difícil tratar con ella

- ¿Difícil? Era imposible, no nos soportábamos, nos queríamos matar – confesé

Comenzamos a contar un poco de cómo nos habíamos conocido y cuando nos empezamos a hacer amigos. Bruno era ese tipo de personas que donde fuera que estuviese, llamaba la atención. Todos querían escucharlo, todos querían verlo, todos se reían con él. Siempre había sido así y esta vez no era la excepción.

Estaba abstraída mientras hablábamos, Bruno llevaba ahí 30 minutos, y eran los 30 minutos que mejor me había sentido desde que había llegado a Estados Unidos. Cuando me di cuenta de que Evan seguía ahí, lo vi observando todo con seriedad, como analizando cada detalle de Bruno. Quizás todavía no se convencía de que era real.

De pronto sacó la voz.

- ¿Y cómo fue que llegaste hasta acá? Río de Janeiro está bastante lejos – le dijo - hiciste un viaje largo

Quiero Olvidarte (#2) COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora