Cierro la puerta a mi espalda dejando a Bucky solo con sus pensamientos para poder centrarme en los míos. Parece que está empezando a recordar y, no sé por qué, pero no me siento tan bien como debería. Mi mejor amigo está recuperando poco a poco sus recuerdos, eso debería hacerme feliz, entonces, ¿por qué se me hace un nudo en el estómago cuando pienso que puede que pronto recuerde algo sobre nosotros? Una parte de mí, una pequeña y egoísta parte de mí, preferiría que no me recordase nunca, para que nunca me culpe de lo que le pasó, para no tener que enfrentarme nunca a su cara de dolor al recordar que fui yo quien lo dejó caer de aquel tren. Aparto esa idea de mi cabeza de inmediato. Quiero que Bucky lo recuerde todo, que sepa quién es, quién soy y como fuimos, que vuelva a ser el de antes, aunque eso implique que me odie, que me culpe tanto como yo me culpo a mí mismo. Me lo merezco.
Inconscientemente, mis pasos me llevan al cajón del salón donde guardo, entre otras cosas, mi bloc de dibujo. Lo saco y me quedo mirando fijamente las pocas fotografías que guardo entre sus páginas. Me fijo en una de ellas en concreto. Nos la hicimos durante la Expo Stark, el día antes de que Bucky tuviera que incorporarse a filas. Cuando fui a revelarla él ya se había ido, así que nunca llegó a ver nuestras caras radiantes, fascinados por lo que en aquel momento parecía la tecnología más avanzada que el ser humano podría inventar jamás. Ojalá pueda enseñársela a Bucky algún día. Vuelvo a colocar las fotos entre las páginas del bloc y, cogiendo un lápiz, salgo por la ventana para sentarme a dibujar en los peldaños llenos de plantas de la escalera de incendios que, serpenteante y ligeramente oxidada, recorre toda la fachada.
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Hasta el final
Fanfiction"¿Me había recordado?" Hace dos días Steve estuvo a punto de morir. No pudo hacer nada para evitar caer de la nave pero Bucky, su mejor amigo, le sacó del agua. El único problema es que Bucky no recuerda a Steve, ¿o sí?