Hasta el final

Capítulo 47

- Menudo día -dice Steve dejándose caer pesadamente sobre su cama.

Acabamos de volver de cenar y se ha hecho bastante tarde.

- Siento mucho haberte preocupado -me disculpo por milésima vez.

- Tranquilo. Siento haberte hablado de esa forma -dice con una pequeña sonrisa culpable.

Le quito importancia con un movimiento de la cabeza y me siento en mi cama. Cojo el pijama con desgana. No quiero irme a dormir aunque esté cansado. La sola idea de volver a tener una pesadilla como la de anoche es suficiente para que no quiera volver a dormir nunca más. Me gustaría poder dormir de nuevo con Steve, pero sé que eso es imposible.

- ¿Bucky? -alzo la vista de golpe al oír mi nombre- ¿Has oído algo de lo que te he dicho?

- No, lo siento. Estaba pensando en otra cosa -me disculpo.

- Te decía que podríamos juntar las camas. No creo que mover esa mesilla que las separa sea muy difícil.

La sorpresa en mis ojos debe ser evidente. ¿Se ha dado cuenta de que no quería dormir solo? Me doy cuenta de que espera una respuesta por mi parte.

- Sí, eso estaría bien.

Steve sonríe y se levanta con un movimiento rápido.

- Genial. Tú ve a cambiarte y yo me encargo de mover la cama.

- ¿Puedes solo?

- Por supuesto, ¿por qué clase de debilucho me tomas? -finge ofenderse.

Entro en el baño y me pongo el pijama con lentitud mientras oigo como las patas de la cama chirrían al ser arrastradas por el suelo. Sonrío ante la idea de dormir tan cerca de Steve. Sé que cuando vivíamos juntos, antes de la guerra, compartíamos una única cama, pero mi memoria tiene demasiadas lagunas como para saber nada más.

Termino de prepararme y vuelvo a la habitación donde me espera Steve, ya con el pijama puesto y sentado sobre su cama.

- Tardón -dice mientras da unas palmaditas sobre mi cama para que me siente junto a él.

- No quería molestarte estando por el medio

- Tú nunca me molestas -mi corazón se pierde un paso antes de empezar a palpitar con fuerza.

Agacho la cabeza para que no vea que me he sonrojado y me tumbo en mi cama cerca de él.

Steve me imita y giramos la cabeza a la vez para mirarnos. Steve parece dudar cuando estira el brazo y toma mi mano. En un movimiento casi instintivo entrelazo mis dedos con los suyos.

- Buenas noches Bucky.

- Buenas noches Steve.

Ambos cerramos los ojos y, poco después, me quedo dormido.

~

Un ruido repentino me despierta. Veo una sombra moverse hacia mí y me yergo sobresaltado. Me quedo petrificado ante la escena que veo ante mí. Un soldado de Hydra ha entrado en la habitación pero, ¿cómo?

No dejo que la confusión ni el miedo me dominen durante más de tres segundos. Me levanto con un solo movimiento fluido y ataco al soldado antes de que se de cuenta de lo que está pasando. Deja escapar una exclamación de genuina sorpresa ¿Acaso pensaba que me rendiría sin luchar? Mi puño se queda a pocos centímetros de su cara cuando consigue detenerlo con una mano. Me pongo a la defensiva de inmediato, esperando que me devuelva el golpe, pero no lo hace. Trato de golpearle de nuevo pero no hace más que esquivar mis constantes ataques. Conozco esta técnica. Espera a que me confíe para atacarme sin piedad.

Consigo alcanzarle con un gancho de derechas que le da directo en el pómulo izquierdo, por donde empieza a sangrar.

Aún así, no puedo negar que es bueno. Sus movimientos son precisos y eficaces. No usa tres movimientos si solo necesita dos. No sé cuanto tiempo llevo peleando con él, pero estoy empezando a cansarme. Algo cambia de repente en los ojos de mi atacante, que parece haberse cansado de jugar a esquivarme porque arremete contra mí de forma repentina.

Sin tiempo para reaccionar, no puedo hacer más que tratar de protegerme la cara con ambos brazos. Sin embargo, el soldado no apunta hacia mi cara, sino hacia mi cintura. Me coje con ambos brazos y me tira sobre una de las camas. Trato de revolverme, pero se sienta sobre mis piernas mientras me sujeta ambos brazos sobre la cabeza para detener mis golpes.