El destino pone a prueba el amor, a veces los sentimientos no son tan fuertes como para superar todo.
Historia de Ian Harding y Lucy Hale, solo ficción!
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A la mañana siguiente, comenzaron el día sin inconvenientes. Se organizaron para ducharse, y luego Ian preparó el desayuno para llevar, debido a que decidieron que lo mejor era que Lucy estuviese en ayunas por si la doctora le indicaba realizarse algún examen.
Al llegar a la clínica, no tuvieron que esperar mucho tiempo hasta que los llamaron para entrar a la consulta. Ambos se sentían muy nerviosos y casi no se dirigían la palabra porque no querían afectar al otro con lo que pudiesen decir.
Dra. Leiva: Buenos días queridos, tomen asiento.
Dijo ella indicándoles con la mano que se sentaran frente a su escritorio, ellos de inmediato obedecieron.
Dra. Leiva: Bueno, cuéntenme, ¿Qué ha sucedido?
Lucy suspira y junto a Ian se dan una breve mirada antes de comenzar a hablar.
Ian: Bueno, nos derivaron a atención contigo porque Lucy está embarazada, y como tú eres su ginecóloga de siempre, pedimos esta hora.
Dice él nervioso y termina de hablar con una sonrisa de alivio. La doctora pudo notar de inmediato que algo sucedía entre ellos, la actitud de ambos y sus interacciones no eran como normalmente solían ser.
Dra. Leiva: Lucy, cuéntame por qué están en esta situación. Yo recuerdo haberte recomendado que le dieras descanso a tu organismo al menos por 6 meses, considerando lo que ocurrió.
Lucy: No fue planificado, pero yo no estaba con nadie y con Ian las cosas no fluían de buena forma, entonces, con el estrés que tenía por todo, olvidé volver a utilizar el método anticonceptivo... Así que, cuando tuvimos un encuentro con Ian, bueno... Quedé embarazada de inmediato.
Ella suspira y la doctora asiente.
Dra. Leiva: Entonces, ¿cómo los toma esta noticia?
Ian: Nos toma en diferentes perspectivas al respecto.
Ian hace una mueca y la doctora asiente.
Dra. Leiva: Es una pena escuchar eso, espero que puedan trabajar en ello.
Lucy: Es algo reciente...
Ian: Y mañana tenemos cita con un psicólogo.
Dra. Leiva: Es bueno oír eso, espero que les vaya muy bien. Ahora, vamos a revisar los exámenes que te realizaron y luego procederemos a hacer una ecografía.
Ambos asintieron y Lucy le entregó la carpeta con exámenes para que ella los revisara. Luego de analizar los documentos, le indicó que se pusiera una bata y se acercaron a la camilla donde realiza las ecografías.
Dra. Leiva: Bueno, esto que ven aquí, es su bebé.
Dijo ella indicando el lugar en el monitor a su lado. Ian se sentía muy feliz de poder ver a su bebé pero reprimió las lágrimas que querían salir de sus ojos. Él estiró su mano en busca de la de su esposa, pero en ese mismo instante ella llevo ambas manos a su rostro y las detuvo sosteniendo su cabeza.
