Oliver/Gary

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Después de que Khan abandonara la casa, John y su sobrino se fueran y Julian raptara a Arthur, él se sentó en el sofá junto a su amigo. Dejó unos papeles en la mesita de café y se tiró hacia atras desganado, pasando las manos por su cabello.

-Hay algo que no entiendo

-¿Tu desición de vestuario?- se burló Gary

-Hace unos meses Julian me pidió comprar una casa para nosotros,porque John y Sherlock querían el departamento para su familia

-Okey

-Lo que no entiendo es porque. Quiero decir, está la vieja casa familiar justo aquí. Podría mudarse conmigo y a ti te conseguiría un departamento

-Gracias

Oliver tomó una de las hojas de la mesa y la miró preocupado

-¿Qué tiene de malo esta casa? ¿Por qué quiere otra propiedad?

-Tal vez tiene un amante con el que quiere vivir

Miró a su amigo con el ceño fruncido, Gary se encogió de hombros y bebió del café que Oliver se había servido

-¡Ah! ¡Mier..coles!

-Esta caliente

-Gracias por el aviso, Ollie

El agente llevó una mano a su barbilla y miró detenidamente las hojas. Tenía propuestas de varias viviendas y departamentos, las separó en pilas dependiendo de su ubicación. De eso partió para separalos en precios y finalmente por tipos de casas. Gary se apoyó en su hombro y echó un vistazo

-Me gusta esa

Puso su dedo sobre una casa sencilla, de un solo piso.

-Es muy chica

-¿Planeas tener hijos acaso? Solo usarás la habitación y el baño

-No es cierto... A veces usamos el sofá

Gary le dio un codazo a su amigo soltando una carcajada, pero entonces miró donde estaba sentado y se levantó de un salto.

-No jodas, cabrón. Aquí duermo

Oliver juntó sus papeles y los golpeó suavemente contra la mesa para acomodarlos

-Podrías usar una de las habitaciones

-En 10 años es la primera vez que lo ofreces

-Creí que era obvio

-¡Me he matado la espalda por 10 años! ¡Y ahora me entero que también dormí sobre tus fluidos y los de Julian!

-Puedes tomar el cuarto que quieras

El agente se puso de pie dejando la pila de papeles sobre la mesita y fue a la cocina por algo de beber. Gary tomó su abrigo y alzó la voz a través de la sala

-¡Tomaré el de Everett!

-Como quieras, Gary

El castaño fue al pasillo de las habitaciones y se dirigió a la ultima puerta de la derecha, era de esperarse encontrar el cuarto vacío pero él lo encaró con una gran sonrisa. Entonces su viejo teléfono sonó con una gastada melodía, un mensaje llegó a su correo. Lo leyó atento y su sonrisa se agrandó aun mas; salió corriendo, cruzó la sala y se apareció en la cocina con un salto asustando a Oliver

-Ollie, estoy montando de nuevo

Exclamó con los brazos abiertos

-¿Cómo que montas de nuevo?- cuestionó confundido

-Bueno, no en caballo, en bici

-¿Montas en bici?

-¿De que hablas?

-¿Que es bici en tu jerga?

-Bicicleta

-Ya me perdí

-No te pierdas

-Okey...

Gary tomó a su amigo de los hombros y sonrió

-Ahora ya puedo devolverte el favor por dejar que me quede. ¡Pronto tendré millones!

-No estoy entendiendo

-Tengo trabajo

-Vaya, me alegro por ti. ¿Qué harás?

-Soy guardaespaldas

Oliver lo miró a los ojos por un momento, frunció el cejo y se rascó la mejilla

-¿Tú?

-Si

-Eso es..

-Grandioso

-Inesperado. ¿Cómo lo conseguiste?

-Hice un trato con alguien que acordó pagarme muy bien

-Suerte entonces

-¡Esto será grandioso!

Gary tomó una cerveza del refrigerador y la chocó contra el vaso de agua de Oliver para brindar. Bebió como si no hubiera un mañana y partió a la sala

-Ahora podré pasar mas tiempo con Ever

Oliver detuvo el camino del vaso a sus labios para mirar a su amigo, dejó la bebida y se puso frente a él antes de que fuera a su nuevo cuarto

-¿Qué quieres decir con eso?

-¿Con qué?

-¿Por qué dices que pasarás mas tiempo con Everett?

-Nunca dije que trabajaría en la CIA, no se de que hablas

Oliver soltó un suspiro y se frotó la frente fastidiado

-¿Conseguiste meterte en la CIA, aun con nada de experiencia, y casualmente para ser guardaespaldas de mi hermano?

-Cuando lo pones así..

El agente negó con la cabeza y tomó su teléfono. Esto olía a Holmes por todas partes.
Antes de que pudiera marcar, una llamada inesperada entró y tuvo que atenderla

-John...¿Estas seguro?... Si,claro. Haré lo que pueda para ayudarte... Adiós

Miró su teléfono al terminar la llamada, lo llevó a su frente y soltó un suspiro.

-Supongo que necesitaremos esa casa despues de todo

Te llevo a cuestas (Freebatch Crossover - Segundo Libro)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora