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Harry despertó gracias a que Anne entró a su habitación hablando en un tono bastante alto y alegre. 

- Harry debes levantarte, hoy es un buen día.

- Mamá -se quejó Harry tapándose con las sábanas- dime que no son las 8 -dijo cerrando sus ojos y tratando de volver a dormir, pues ya sabía la respuesta.

- No cariño, como crees -dijo Anne con tono de burla en su cantarina voz- son las ocho con quince. Ya levántate por favor.

Se acercó hasta la cama de Harry sentándose a un costado de donde Harry estaba cubierto con las sábanas.

- Mamá no quiero ir, es muy temprano, la feria seguirá ahí hasta el mediodía y mañana, y toda la semana.

Anne sonrió y destapó la cara de Harry, dejando ver unos rulos despeinados y un Harry somnoliento.

- Levántate ya, vístete y baja a desayunar -dijo dando un pequeño beso en la frente de Harry y saliendo de la habitación.

Refunfuñando Harry se levantó de su cama y se metió al baño para asearse y al salir vestirse sin demasiado entusiasmo.

Cuando bajó a desayunar, se encontró con que Gemma no estaba en la mesa.

- ¿Y Gemma?- preguntó Harry a su mamá señalando la silla vacía.

- Está por bajar, ya le hablé.

- Está bien, mami -sonrió mientras tomaba el cereal y se servía un poco en su tazón.

- Me extrañaste ¿verdad? -preguntó Gemma al sentarse junto a Harry.

- Claro que no -dijo sacándole la lengua.

Desayunaron y conversaron un poco, se dividirian en la feria, pues Harry y Gemma no disfrutaban tanto el conversar con las amigas de Anne como ella lo hacía. Entonces cuando se pusieron de acuerdo en mensajearse cuando quisieran irse, el desayunó terminó y el trayecto en auto hasta la feria inició.

Cuando llegaron a la feria, Anne les dio algo de dinero a sus hijos por si era necesario, o simplemente por si querían montarse en algún juego.

Harry y Gemma iban riendo mientras ninguno atinaba a decir el mismo número durante los últimos 4 retos hasta que Gemma atinó haciendo que Harry camine en reversa durante un minuto, ella se le unió para poder divertirse también. No había mucho por hacer hasta ahora.

- Ups -dijo Harry al sentir como detrás de él alguien derramó algo debido a que Harry lo chocó, al darse vuelta Harry quería que la tierra lo tragase, Gemma al percatarse de la situación estalló en risas haciendo que Harry se sonrojara.

Louis divisó los verdes ojos y los reconoció al instante, porque eran incomparables, claro también reconoció los rizos y la risa de la acompañante del chico. Con las manos pegote, su cucharilla y parte de su helado en el suelo se volteó hacia el rizado.

- Hola otra vez -dijo Louis mientras con la mirada buscaba servilletas, un grifo o algo con que limpiarse las manos.

- Creo que ahora puedes comprobar que sí está tonto -dijo Gemma sin parar de reír, lo que hizo que Louis se riese levemente también.

Felicite por su lado notó a Louis con las manos chorreando, se acercó a él y le entregó unas servilletas que le habían dado en la heladería.

- Gracias Fizzy -dijo Louis mientras las recibía y veía como su hermana asentía y se alejaba con una sonrisa en su rostro, dejándolo allí solo.

- Lo siento mucho, en serio -dijo Harry tratando de sonar lo más tranquilo posible, pero su cara seguía color carmín, lo cual hizo reír levemente a Louis, otra vez.

You are the only one - Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora