𝐄𝐆𝐎 [Sunnew] ©︎

Capítulo 26

¿Lo hago? ¿No lo hago? Esas preguntas tenían la piel de Sunwoo de punta. Sentando frente al escritorio de Hyungseo, mientras su mano derecha sostenía aquella USB no podía evitar pensar en toda la información que esta llegase a contener dentro. Estaba ya solo en ese sótano tan callado, sin embargo, su curiosidad lo acompañaba.

Encendió uno de los monitores, vaya que para su sorpresa, aquel monitor logró reconocer el rostro de Sunwoo en segundos. Fue algo raro para él, pero lo dejó pasar una vez e insertara la USB dentro. Varias ventanillas llenas de carpetas salió de la nada, y cada una de ellas mostraba una fecha.

Dió click a la primera carpeta, mostrando todos los documentos desde el día que la familia adoptó a la madre de Sunwoo. Observar esa carpeta realmente no fue nada intenso para el chico, abrió cada documento posible, así cuando llegó a la fecha del 2014, su corazón se llenó de nervios, y más, al ver que contenía varios archivos dentro.

Sus ojos miraban por doquier, mordía su labio inferior guardándose todo, porque a fin de cuentas, aun recordando todo el daño que sus padres causaron en él, aun recordando todos esos golpes, ellos seguían siendo sus padres.

Noviembre 23, 2014
4:56 PM

Acordándose ver en el mismo lugar en el que planearon su fuga. Su esposo frente a ella protegiéndola a toda costa, porque ambos sabían de lo que podía ser capaz un enfermo como el Señor Choi. Ya se había encargado de matar a la esposa del mafioso más poderoso de Corea, casi mata a su hija de igual manera, sin embargo, no lo hizo. En lo más profundo incluso del corazón de la Señorita Moon deseaba proteger a su hijo, y vaya que para su suerte, el abandonarlo fue la mejor decisión que pudo haber tomado.

Llegaron a ver una camioneta negra acercarse, así luego estacionados justo frente a ellos. A los pocos segundos, salió el Señor Choi de la parte trasera junto con un guardaespaldas. Una sonrisa entre dientes de inmediato apareció en el rostro de la Señorita Moon, y es que el tan sólo ponerse a pensar que el gran CEO necesitaba ser protegido era irónico para ella.

—Llegue temprano, ¿No es así?—preguntó aquel con una gran mueca de seriedad—. La primera vez que la vi Señorita Moon, quiso negarse a un asunto de negocios. Ahora que la veo por segunda vez, quiere romper todo tipo de conexión conmigo, ¿me va decir que el esfuerzo que hice para mantenerlos escondidos desde que abandonaron a su hijo no sirvió de nada? Por favor.

—Nunca llegamos a un acuerdo con usted, pero irnos de la ciudad fue lo mejor para nuestro hijo—respondió inmediatamente el Señor Kim.

—¿Lo mejor para él? Ahora es un niño abandonado que camina por las calles, jamás se atrevieron a decirme su nombre, ¿Ahora se alejaran para que sean libres? No, no dejaré pasar eso.

Un enfermo puede matar a alguien en segundos sin tener una razón para hacerlo. En cuanto terminó de hablar, miró a su guardaespaldas asintiendo con su cabeza, en ese momento sólo se escuchó un gran impacto de una bala salir por fin de una pistola. El cuerpo del Señor Kim terminó en el suelo luego de que aquella bala pasara por su cabeza, y desde luego, su esposa quedó quieta al ver a su amado caer. Un alma más sin vida.

Acercó sus pasos hacia la Señorita Moon, la cual se mostraba indefensa pero utilizó toda su fuerza para poder zafarse del agarre del contrario. El Señor Choi la tomó del cuello mientras tiraba de su cabello con fuerza. No dejaría que se fuera con la suya, y ahora menos que asesinó a su esposo.

—¿Ya le dije que la primera vez que la toque fue increíble? ¡Responda! —su mano izquierda sosteniendo el cabello de ella, se encargó de empujarla para que finalmente cayera al suelo—. Su hijo, ¿Cómo se llama? ¿Tendré que deshacerme de él también?