Pato era mi mejor amigo desde que tenía trece y el catorce, siempre había tenido un lugar en mi corazón y solo por eso nunca le conté como me sentía en realidad, cuando regresó a IndyCar perdí todo el contacto con el, nos convertimos en extraños. Pero el otro día me lo encontré en el motorhome de Mclaren cuando iba a entrevistar a Lando y me dí cuenta de que los sentimientos seguían más vivos que nunca...y que lo había extrañado más de la cuenta. Saga: bajo la máscara del deporte.