You can go

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Allí estaban, la que fue antes una feliz pareja, ahora no era más que un lío de arrepentimientos y corazones rotos.

Ella miraba al hombre que amaba, con los ojos rebosantes de lagrimas, en sus mejillas antes rosadas solo habían fríos recorridos de lagrimas y la misma palidez de alguien que vio un fantasma.

Él por otra parte tenía en sus ojos arrepentimiento, su rostro igual de pálido que el de ella, solo reflejaba angustia, sus labios entre abiertos y resecos cual naufrago sediento.

Amber: ¿desde hace cuanto? - cuestiono ella con un hilo estrangulado de voz.

John: 3 meses- apenas era un murmullo, pero su respuesta fue clara para ella.

Amber: ¿por que?

John: Amber...yo...-tratar de explicarse era inútil, él también sufría, pues había traicionado la confianza y el amor de la mujer que estuvo con él desde mucho antes de ser una figura pública y reconocida a nivel mundial.

Amber: como paso? ¿como es que esa......mujer me acabo por quitar al amor de mi vida?- sus propias preguntas le hacían daño, igual que cuchillos clavados directamente en su pecho.

John: no lo sé....yo creí que  solo la veía como una amiga, pero cuanto más tiempo pasaba con ella, más me confundía.....y yo....

Amber: subió su mano con la palma extendida- no digas más....es suficiente....ve con ella- sonrío  y en aquella genuina sonrisa se notaba el dolor y el decepción.

John: Amber....no me pedirás....

Amber: quedarte? para que?- su tono era tranquilo, igual que ella siempre lo es- amas a otra mujer John Lennon, y siento que no soy yo, entonces....de que sirve rogarte?

John: perdóname....no quise hacerte daño, sé que encontraras a alguien que te ame y que te dé lo que yo no pude

Amber: siempre tan comprensivo- susurro- no te disculpes.....me amaste hasta donde tu corazón pudo.....estoy feliz por ello- su sincera respuesta pesó en el dolido corazón del castaño.

John: o quizás podría intentar....-dudó tratando de calmar el sentimiento de culpa que se presentaba en su interior.

Amber: no....ve con ella, seguro te espera como cada tarde desde hace tres meses- corto sonriendo, se acerco a él y le acomodó la ropa como si fuese a trabajar- aquí ya no hay que te até, solo ve y no le hagas esperar más

John: perdóname Amber....

Esa ultima despedida hizo que ambos corazones latieran en sincronía una única vez más... 

Ella permaneció en la puerta mirando al amor de su vida marchar a otros brazos.

¿Estaba rota? por supuesto, pero no pelearía en la que nunca participo. No era cobardía...era más bien, una forma de resguardar lo poco que le quedaba de su herido corazón.

Sonrío recordando los buenos momentos, empaco sus cosas, cerró todo con llave y se marcho, dejando atrás aquel hogar que alguna vez fue testigo del amor que dos desbocados corazones se profesaban.

Se marcho y allí dejo su amor, su corazón y sus recuerdos de la maravillosa persona que era John Lennon.... 











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