El honor corría por mis venas desde antes de nacer, mi padre y abuelos me criaron para la grandeza, sin mas limites que los que mi mente decida ponerse, mi familia me dio el honor y la meta, la armada Americana el rifle y el entrenamiento, yo los h...
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Dereck Stone.
Hace aproximadamente 12 meses les vi en Wts. En uniforme de gala, en medio de una reunión para hablar sobre el congreso militar en Oregon y en ese momento no se me habria pasado esto por la cabeza, nunca me habría visto de chofer de estos tres.
—¿Ella lo sabe? —Indaga yo niego con la cabeza como respuesta sin apartar la vista del camino, el mensaje de Luck llegó hace un par de minutos y si todo sale bien llegaremos a tiempo.—Llegamos tarde, verdad. —Esta vez lo dice sonriendo y con ese tono tan propio suyo.
—Nosotros no —Aclaro—, ella ha decidido visitar a sus padres señor. —Aclaro dando un volantazo la derecha. —, y la verdad es que no contábamos con eso, se suponía que se quedaría en casa con Arias hasta el final de turno.
—Elly es única. —Sonrió al escuchar a Parker—Aparte de buen soldado es devota a sus abuelos.
—Te has sacado la lotería Stone —Agrega el coronel Bullock y de no estar conducción lo le miraría extrañado, ¿lotería? Estar con tara no es cosa de suerte.
—¿Loteria? —Interviene Antony en un tono burlón—Acabas de llamar a mi pequeña ¿loteria?
—Es el puto premio mayor —Replica entre risas y veo el momento justo en que Antony desabrocha sus cinturon para poder reclinarse atrás y golpearle.
—Mi pequeña no es una objeto—Agrega aun riendo y me quedo atónito.
intercambian malas palabras y un par de golpes de ida y regreso, todo en medio de las risas de Parker
—El C.J le llama arma y al no le pegas. —Le acusa Parker asegurándose un golpe del general.
—¿Golpearias tu al presidente de la nación?— Lo suelta como si hablaran de cualquier hombre. Intercambian malas palabras y empujones como si fueran niños, y aun cuando insistieron que por lo menos por hoy debo dejar los rangos de lado sigue siendo complicado.
viene el ropa de civil y eso ya es bastante raro de ver, bermudas y camisetas de manga cortas perfectos para el calor que hace hoy...
—Señor.
—Antony —Me corrige— Puedes llamarme papá si quieres —Se burla, el coche se llena de risas y abucheos mientras yo no aguanto la risa, maldito cabrón.
—Ha dicho que sería una reunión pequeña ¿No? —Rie como respuesta y cruza miradas con el resto de nuestros acompañantes y si antes pensaba que se iba a enojar ahora me va a matar o golpear como mínimo.
Así que me resigno. El resto del camino se pasa en risas y comentarios entre ellos y algunas sonrisas incómodas mías, doy un último volantazo para entrar a la inmensa parcela de los Amarok para ver cómo los chicos se bajan del jeep de shinoda, confirmo nos va a matar a todos, unos 15 coches más están afuera se ve la gente caminando en el interior, a través de los ventanales y en el jardín que da a la playa.
