cap 71

519 80 29
                                    

Ellys Price.

—¡Tara! —el grito me abandona sin permiso.
Mierda.

Hago esto incluso desde antes de que ella naciera, la guerra, el peligro y los problemas fueron parte de vida desde que nací uno a uno los integrantes de mi familia perdieron la vida en las distintas guerras que nuestro país libro, desde el guerra del golfo a Afganistán y Somalia. Y  dolor se instalo en mi, fría, sin nada que perder no ahí mucho porque vivir.

El honor a mi nación y la gloria de la lucha me ayudo a sobrevivir, resistía

Cada calada de aire era prestada, ajena y sumamente agotadora.

Dolor, humo quizás algo de pólvora y en medio de todo aprecio él,  Antony Amarok, con demasiado amor que dar inclusivo mas del que podía entender o conocía y me deje llevar como si fuera una leve brisa sin siquiera saber que era eso en él que me dejaba respirar tranquila. 

Justo antes de poder siquiera entenderlo me pudieron los medios.

Nunca viví en un solo lugar, pensar en una casa , el encierro y las verjas me daban ansiedad y un desespero imposible de explicar con palabras. Ahora las anhelo.

Demasiado tonto.

No volver al servicio era impensable e ilógico y ahora que llevo más de un año por fuera me siento libre.

Aun así lo intente quise intentarlo y el cambio de parecer, la duda de si realmente me amo alguna vez acuchillo mi pecho los primeros años y termine volviendo la primera vez a el.

No era que no les quisiera cuando me fui, es que no sabia como hacerlo, no fue cobardía solo fue la vida y sus decisiones. Antony las tomo por los dos y lo entendí demasiado tarde.

Debí saber que uno no deja de amar de un día a otro, debí saber que mentía. Pero todo en él era nuevo para mi, la delicadeza, el afecto y la necesidad de cercanía. Su curiosa forma de pensar y actuar, su manera de mirarme. Todo fue nuevo incluso cuando me rompió el corazón.

ahora me pregunto si las cosas serían hoy diferentes si me hubiese quedado.

Si hubiese luchado por el, si le hubiese obligado a decir la verdad.

¿Viviríamos en una pequeña cabaña al borde de la playa?

¿Sería ella militar?

¿Estaríamos aquí en medio de todo este caos?

Mi parte militar no habría cedido ante la lógica de eso estoy segura, aun cuando mi parte maternal la quiere complacer también la quiere proteger.

Lo ha dicho demasiadas veces como para poder contarlas.

Ya no es una niña. y quiero creer que es mi apoyo lo que necesita ahora, porque ya lamento demasiadas decisiones en mi vida como para lamentar esta también.

Su voz rogando que se detuviera en el auricular bloquearon mi cuerpo por completo. y sumió al escuadrón entero en un silencio aterrador.

No deja de ser mi niña, aun cuando ella se niegue. Mi niña.

Se me estruja el pecho de forma descomunal.

Las órdenes fueron claras "Dejarla ir" Fue clara demandante e intimidadora de muchas formas "Es una orden" con la mirada vacía y en destello de auto destrucción y aún así Martin no pudo mantenerse.

El establecimiento está ahora casi vacío, cristales el suelo y el particular aroma que dejan las balas al ser detonadas.

Huele a caos.

Hades (Honor y Gloria) Terminada ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora