El honor corría por mis venas desde antes de nacer, mi padre y abuelos me criaron para la grandeza, sin mas limites que los que mi mente decida ponerse, mi familia me dio el honor y la meta, la armada Americana el rifle y el entrenamiento, yo los h...
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Temerle a un disparo es cosa de sentido común, el 99% de población entra en pánico cuando ve un arma de ese 99% un 25 entra en shock total.
Dicen que no sabes como reaccionara tu cuerpo hasta que estas en la situación.
Nosotros entrenamos más nuestros cuerpo al igual que nuestras mentes para que cuando todos receptores automáticos de tu cuerpo griten que debes apartarte. huir o agacharte caminen en dirección contraria.
Le haces frente a proyectil que puede segar tu vida
¿Por qué? Es justo lo que me pregunto ahora.
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—¿Estas bien? —Me arrastra de las caderas hasta sus labios.
El giro automático de mi cuerpo cuando insiste en que no estamos fuera de peligro.
Los ojos tan negros. Como agujeros negros que insisten en arrasar todo a su paso.
El golpe de lleno sobre el pecho.
—Nena..
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Las pistolas matan a casi 100 personas en Estados Unidos. Peor aún, estas pistolas y las balas que se disparan no son armas hiper-precisas como las que vemos en Hollywood o en guerra. Son imprecisas y hacen mucho más daño del que puedas imaginar.
4584 fue la cifra de soldados muertos en Irak la última vez que la revise y es solo una de las tantas guerras que libra nuestra poa cada día. allí aunque las armas son mucho más precisas los disparos son más limpios y se tiene un poco más de probabilidades que sobrevivir a un callejero, quedan en el aire las bombas las torturas y todo lo que los hayis encuentran para matar desde un martillo clásico de bricolaje hasta un taladro percutor y porqué no un hierro caliente.
Aun así vamos a la guerra con la mente en alto, con honor. A traer la gloria que merece el uniforme, la insignia y el país.
porque cada uno de nosotros es. fue y será suelo americano.
¿Quién podría no temerle a una bala?
Después de todo, hay una razón por la que las armas no han cambiado mucho en los últimos cientos de años: son eficaces. Pero más allá del agujero obvio que una bala hace en tu piel, se produce mucho más daño en el interior.
Rompen tu cuerpo y en algunas ocasiones tu mente.
Cerca de 90% de esas muertes evitables se deben a la pérdida de la sangre más que al impacto mismo. El cuerpo humano está diseñado para soportar y mantenerse en situaciones descomunales.
pero desangrarse no es una de ella.
Nath ha estado al borde de la muerte más por desangrarse que por las mismas heridas
