Capítulo 65

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La señora Lee llegó cargada con varias bolsas, que levantó con una enorme sonrisa en cuanto le abrieron la puerta

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La señora Lee llegó cargada con varias bolsas, que levantó con una enorme sonrisa en cuanto le abrieron la puerta. Las presionó sobre las brazos de su hijo mientras lo saludaba y fue directa a preguntarle:

—¿Dónde está mi nieta?

—En el salón viendo...

La mujer no le dejó terminar antes de echar a correr en dicha dirección. Ellos se miraron con diversión, y Hyukjae le señaló con la cabeza que fuese con ella mientras él se encargaba de llevar las bolsas a la cocina. Obedeció, no sin antes darle un pico en los labios.

Cuando llegó, la niña seguía sentada en el sofá con Koda y el reno cada uno a un lado pero con los ojitos entornados con confusión en dirección a ella. Quizás debería haberle contado antes que iban a tener una visita, pero entre la salida al cine, la visita al médico y buscar el regalo perfecto para Hyukjae se le había olvidado por completo hasta esa mañana, y, después de aquella intensa ducha, había estado demasiado ocupado prometiéndose que no rompería el trato hasta, por lo menos, la tercera cita. Eso significaba, además, que debía planear la primera cuanto antes.

—¿Quién eres? —la voz infantil lo sacó de sus pensamientos. Cruzó miradas con ella y le dedicó una sonrisa, cosa que pareció tranquilizarla a tiempo para que la anciana se inclinara sobre ella para mirarla más de cerca.

—Soy la madre de Hyukjae, el... amigo de tu padre.

Entonces Haneul frunció el ceño, retrocedió y sacudió la cabeza. No había más miedo ni más confusión ni nada que se le pareciera, solo seguridad.

—El profe no es su amigo, es su novio.

—¿Qué? —la mujer se giró hacia él, bastante sorprendida— ¿Lo sabe? ¡Pero es muy pequeña!

—Claro que lo sabe. Fue la primera en saberlo.

—En realidad —notó la presencia del mayor a su espalda y una mano posándose en su cintura—, Sora fue la primera.

No se sorprendió. Hacía tiempo que había aprendido que su hermana iba a ser siempre la primera era enterarse de sus avances o discusiones. Ella era una parte fundamental para la vida del mayor y estaba de acuerdo con eso.

Ella, en cambio, no debió de escuchar las palabras de su hijo, pues estaba demasiado centrada asimilando que una niña de seis años fuera feliz sabiendo que su padre tenía una relación con otro hombre. No era tan cerrada de mente como su marido, pero estaba claro que todavía le faltaban muchas cosas que aprender.

—No te preocupes, mamá, ella era la que más deseaba que lo hiciéramos oficial. ¿A que sí, cariño?

—Sip, yo le dije a papi que quiero que sean novios y ahora ellos son novios. Menos mal, porque papi se pone triste cuando el profe no está con nosotros.

—O-osito —intentó pararla, notado que sus mejillas enrojecían cada vez más— n-no hace falta que...

—Pero ahora se dan muchos besos en la boca y muchos abrazos y el profe duerme siempre en casa y me arropa por las noches y jugamos a superhéroes y el profe le dice "te quiero, te quiero, te quiero" pero papi solo dice palabrotas.

Stirring Up [EunHae +18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora