Stirring Up [EunHae +18]

Capítulo 46

Miró a sus amigos. Ambos hablaban tranquilamente, apoyados a su lado en la esquina en la que habían quedado con los otros tres. Llevaba toda la mañana nervioso, esperando que llegara ese momento, y ahora que faltaban escasos minutos la sensación no había mejorado. Intentaba disimular, pero era incapaz de frenar sus ganas de asomarse a buscarlos cada pocos segundos.

—¿Os han dicho algo? —preguntó mientras daba saltitos cargados de impaciencia— ¿Les habéis preguntado por dónde van?

—Dice Heechul que están llegando —respondió el mayor.

—Me sorprende que hayas aceptado con tanta facilidad —agregó Kyuhyun—. Pensaba que Hyukjae y tú estabais peleados.

—¿Eh? Oh... sí... pe-pero... Lo hablamos y ya está solucionado.

—¿Lo hablasteis? ¿En serio? Y yo que pensaba que vosotros solo sabíais discutir.

Se echó a reír como si acabara de escuchar el mejor chiste del universo. Sus amigos lo acompañaron con diversión, como si entendieran lo que realmente le hacía gracia. ¿Que solo sabían discutir? No dirían eso si supieran que aquella misma mañana había despertado entre sus brazos.

—Me alegra que ya esté todo claro. Así podremos pasar una tarde tranquila los seis juntos.

—Los siete —corrigió el menor, y señaló a su espalda.

Donghae dio media vuelta de un salto, esperando encontrar a Siwon como séptimo miembro del grupo. Pero no. La persona en cuestión no era alta ni masculina ni iba abrazada a Heechul. Era bajita y delgada, tenía el pelo corto, tatuajes, pendientes y vestía ropa ancha. Demasiado ancha para ser suya.

—Sophie —masculló.

—¿Esa no es la chica que fue al restaurante italiano con Hyukjae?

—Con Hyukjae, su hermana y su cuñado —se dio prisa en corregir—. No lo digáis como si hubiera tenido una cita con ella.

—Bueno, perdona.

—Está bien —se cruzó de brazos. Le pareció escuchar la risa de sus amigos tras él, pero no le hizo mucho caso. Entender por qué esa chica llevaba la ropa de su amigo era más importante. ¿Qué diablos hacía allí, para empezar? Si solo habían quedado con sus amigos para que aquello no pareciera una cita.

Malditos nervios. Debería haber aceptado salir a comer con Hyukjae y así no habría tenido la horrible necesidad de soportar a una... una... no podía catalogarla porque nunca había hablado con ella, pero seguro que era mala. Podía notarlo en la forma en la que sonreía mientras hablaba con Hyukjae. ¿Quién se creía que era? Si no había conseguido tener sexo con él cuando éste dudaba de su sexualidad, no iba a conseguirlo ahora que 1) estaba seguro de ella y 2) lo tenía a él para satisfacerlo donde, cuando y como quisiera.

Cuando el grupo llegó hasta ellos, sus ojos viajaron inmediatamente hacia los de color miel. Estos le devolvieron el gesto durante un momento antes de dirigirse hacia los otros. No dijo nada porque no quería resultar demasiado obvio. Los saludó a todos con una sonrisa impostada, dejando a la chica para el final.