Hard for me |Kim Doyoung; NCT|

Capítulo 5

Doyoung se derrumbó en el sofá de su piso tremendamente cansado de aquel día. ¡Menuda Odisea haberse topado con esa Kang Sohyun!
Tomó su ordenador portátil para ver los calendarios académicos y apuntarse los exámenes que habían sido planeados desde el inicio de curso en la agenda de su teléfono móvil para no llevarse sorpresas.

Se descargó el material de clases que algunos profesores habían subido para facilitar la tarea a sus alumnos y vio la cantidad de trabajo que el profesor de composición les haría hacer a lo largo del curso.

El sonido de su teléfono lo distrajo y lo sacó de su bolsillo para ver qué había sido aquella notificación. Suspiró al leer que la notificación era de Instagram, más en concreto un me gusta. Aun yendo a abrir la notificación, sabía que se trataba de esa pesada de Kang Sohyun. ¿No podía simplemente olvidarse de él y perderse por ahí?

Le había dado un me gusta a una de sus publicaciones más viejas. El moreno lo pasó por alto pero fue suficiente para que pensase en la chica por lo que restaba de tarde.

Se dirigió a su habitación para ponerse ropa más cómoda y recoger un poco la casa antes de ponerse con sus primeros pasos en la planificación de estudios; listas de lo que necesitaba comprar, calendarios bien estructurados, libros ordenados y carpetas en su ordenador para todos los archivos que necesitase.

Quería ser un gran músico, pero sabía que aquello lo alcanzaría con dedicación y sin procrastinar.

Decidió bajar la basura tras recoger y limpiar la cocina llevando afuera la bolsa con cuidado para no manchar la impecable camiseta holgada. Tenia unas cuantas en el armario que lavaba con cuidado y planchaba aunque fueran para llevar en casa.

Bajo las escaleras como hacia siempre, evitando los ascensores que de alguna manera le volvían ansioso e incomodo y abrió la puerta del portal para dirigirse a los contenedores de la acera de enfrente.

Sumido en su trayecto con la vista al frente fija en su destino, no vio venir el impacto de una persona que se aproximaba acelerada calle abajo y se llevó de lleno a Doyoung en plena calle.

—¡Ay! —El moreno se encontraba en el suelo, con la bolsa de basura reventada a más no poder y toda su ropa manchada de restos de comida y demás desperdicios orgánicos.

—¡Disculpa! —La chica morena con la que se había estrellado se levantó y sacudiéndose la ropa le tendió una mano para ayudarle a levantarse. —Perdona, venía corriendo y...

—Sí, lo he visto... —Dijo Doyoung examinando su ropa manchada. ¡Menudo desastre! —Pero no te preocupes, estoy bien.

—¡Uf! ¡Cómo me alegro! —La chica era bajita. Traía su largo pelo oscuro recogido en una coleta alta de la que se escapan algunos pelos que tras la carrera, se pegaban a sus sienes y patillas. —Estaba cuidando al... ¡Ahí estás! —La chica también con manchas de basura interrumpió su explicación para señalar uno de los árboles que había calle abajo.

En el descansillo del árbol había un gato de color grisáceo y la chica de la sudadera corrió hacia él para atraparlo entre sus brazos.
Doyoung vio entretenido la escena ligeramente divertido por la chica. Era muy adorable y cuando se hizo por fin con el gato, le hizo algunas carantoñas. Aquel gato se le hacía extrañamente familiar y su privilegiada memoria no sabía dónde lo había visto. Seguro que era aquel que salía en los anuncios de pienso.

La chica volvió con el gato en brazos y pasó por delante de Doyoung haciéndole una leve reverencia para despedirse tras su breve encontronazo. El chico terminó de tirar la basura recogiendo lo que se había caído y volvió a su casa para terminar sus metas para la tarde.