Hard for me |Kim Doyoung; NCT|

Capítulo 20

Doyoung leía con detenimiento aquel blog informativo de internet que hablaba de las festividades paganas de la rueda del año. Lo mismo a lo que Sohyun se había referido denominando "Sabbats".

Empujó las gafas por el puente de su nariz para subirlas y, como comenzaba a parecer costumbre, dirigió su mirada de la pantalla de su ordenador a su nevera donde había pegado con un imán el panfleto de la bruja a la que recurría tanto.

No sabía ni por qué, pero le gustaba pensar que era una manera por donde empezar a abrirse aun que a la persona al otro lado de la línea le diera igual su vida o quién era. Podría hacerlo con gente de su entorno en lugar de con alguien que le sacaba los cuartos, pero no quería ser juzgado y si mantenía una conversación ligeramente profunda con alguien como Changgu, su único amigo hombre, probablemente le cuestionaría hasta la manera de parpadear y se reiría de él.

Tomó el papel y marcó sin mirar la pantalla esperando a oír aquel mantra de "La hija de Artemisa" que le producía sentimientos encontrados. Lo detestaba pero después de hablar, solía sentirse bien y desahogado.

—Gracias por llamar, errante que buscas respuestas; pues yo, la mismísima hija de Artemisa, con el poder de mi magia y mi energía te serviré como guía. Adelante, ¿qué quieres saber? —Doyoung tomó aire. Hacía algunos días que no consultaba a la hechicera y tenía cosas de las que ponerle al tanto.

—La sacerdotisa y yo. Creo... Creo que ya no hay más peleas.

—Oh, eres tú, el errante que entraba en conflicto con el poder. ¿Así que la mujer poderosa es ahora... tu amiga? —Doyoung asintió a pesar de que no podía verle.

—Así es. Bueno, creo. —Se rascó el brazo confuso. —Una cosa llevó a la otra y... para evitar tensiones, ambos nos relajamos. —Confesó.

—Maravilloso pues, dada tu nueva amistad, ¿a qué se debe la consulta? ¿presenciáis un servicio de la hija de Artemisa en específico? De tratarse de magia negra relativa al amor, el precio será alto.

—¡No, no, no! ¡Nada de amor!

—¿No? Creí que buscabais más acercamiento con la Sacerdotisa.

—¡Ew! ¡No! ¡Que hayamos hecho las paces o algo así no significa que quiera que sea mi novia o algo parecido! —La bruja se rio y Doyoung golpeó el suelo con la punta de su pie repetidamente, ya le estaba poniendo nerviosito el tonito sabiondo de la maga. —Menos risitas.

—Cuesta creer viniendo de un hombre. —Doyoung puso los ojos en blanco. —Aunque me complace saber que no tenéis intenciones mayores con la mujer de poder.

—¡Increíble como en estas llamadas siempre me cabreo contigo Artemisa junior! —Pudo escuchar con claridad la risa de la bruja al otro lado de la línea pero sabia que esta vez se debía a su comentario. —No busco pócimas de amor ni cosas de esas. Se acerca Mabon y...

—¡Oh, celebráis los Sabbats y Esbats? —Interrumpió la chica.

—Sí, sí, ese no es el caso; llamaba porque ahora que tengo...

—¿Amigos? —Doyoung frunció el ceño sospechoso. Parecía que esa tipa le espiaba.

—Eh... Sí. Quiero quedar bien, ¿debería llevar algo? —Preguntó.

—No te frustres por eso Doyoung, habrá más que suficiente si lo pasáis todos bien. —Habló sabía. —Aunque siempre puedes aportar algo de temporada. Es otoño y el día y la noche durarán exactamente lo mismo, apuesta por dulces y frutas de temporada, ¡o mejor! ¡combínalos!