Capítulo 40

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Sohyun no paraba de mover la pierna en la incómoda silla de plástico de la comisaría pero se detuvo cuando sintió la mano de Doyoung sobre su rodilla. Movió el rostro para verle y volvió a encontrarse con una de esas pequeñas sonrisas esperanzadoras que el chico le dedicaba de tanto en tanto.

Yujin estaba declarando en una sala aparte y ellos dos, como sujetos que no habían presenciado la pelea del club, no tenían otra cosa más que esperar al dar negativo en el test de drogas.

Jaehyun, por otro lado, acababa de recibir asistencia primaria para sus golpes y aún como si estuviera adormilado esperaba con trozos de algodón por toda su cara sobre una camilla improvisada en la otra punta de la sala esperando a que dejara de sangrar para que pudieran realizarle un test rápido con el que verificarían si había consumido alguna droga.

—¿Qué crees que pasará? —Preguntó Sohyun con un hilo de voz.

—No lo sé. —Respondió con sinceridad Doyoung. —Solo espero que no le pase nada a Jaehyun. —Pasó un brazo por los hombros de la peliazul y la trajo hacia su pecho para depositar un cálido ósculo en su cabeza y acariciarle la espalda tratando que se relajase un poco.

Los policías iban y venían por toda la comisaría. Habían detenido a más personas que había en el club por llevar alguna droga consigo o empezar a propinar golpes sin ton ni son bajo los efectos de dichas sustancias. Entre las personas detenidas se encontraban Taeyong y Yuta, además de Jaehyun.

Para fortuna del joven Lee, ninguno de los interrogados o interrogadas lo había señalado a él (o a Yuta en su defecto) como proveedor de las drogas que tenían. Iban demasiado mal para acordarse y Taeyong, habiendo dado negativo en todas las pruebas de drogas, salió limpio después del largo reconocimiento y preguntas sobre la pelea.

—Hola chicos. —Dijo al aproximarse a Sohyun y Doyoung. Tomo asiento en las sillas de plástico blanco que tenían justo en frente y Sohyun se incorporó dispuesta a bombardearle con preguntas como si fuera una de las comisarias. —No hace falta que preguntes nada, te lo explicaré. —Adelantó el chico.

—Bien, ¿has tenido que pagar alguna multa o algo? —Preguntó curiosa. —¿O te han soltado?

—Estoy fuera. Solo había bebido y siendo mayor de edad, eso no supone ningún problema para mí. —Explicó. —Pero Jaehyun... —A Sohyun parecía habérsele olvidado el hecho de que su hermano era todavía un año más joven que ella y no cumplía los dieciochos años hasta febrero. Por lo que regentar un club de ese tipo, beber y drogarse, suponían un problema importante para el chico.

Sohyun solo quería que todo eso acabara pronto. Eran las tantas de la madrugada y quería hundirse dentro del abrigo de Doyoung y desaparecer durante un par de días. Optó sin embargo, por mantenerse serena y escuchar lo que Taeyong tenía que explicarles.

—¿Qué pasó hyung? —Preguntó Doyoung.

—Bueno, al principio estábamos solo Jaehyun y yo, y Johnny, un compañero suyo de su nuevo trabajo con el que quería salir un rato. —Comenzó a explicar. —Johnny se marchó antes de las doce y nos quedamos nosotros dos. Estábamos bebiendo como siempre, sin drogas ni nada. Pero un chico le ofreció un porro a Jaehyun mientras echábamos una partida de billar y aceptó. —Taeyong miró a Sohyun como si se disculpara. —Lo siento Sohyunie, le dije que lo dejara pero me dijo que por un par de caladas no iba a pasar nada. —Sohyun asintió y dejó que prosiguiera con su historia. —Pero una cosa llevó a la otra y cuando fui a por más bebidas me lo encontré metiéndose algunas rayas con el mismo chico. Le detuve ahí y me lo llevé a la mesa en la que estamos siempre. Quería que se le pasara todo un poco para volver a casa, sabía que era lo mejor para los dos, pero cuando le subió a la cabeza la droga mezclada con el alcohol... El muy idiota llamó a Yujin.

Hard for me |Kim Doyoung; NCT|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora