Veía como grandes columnas estilo romano de color hueso iban en filas y que al final de esta había una puerta, entre ellas entraba el sol del lado izquierdo, era una resolana muy potente, parecía que tenía destellos dorados. Caminé en medio de ellas hacia la puerta que era oscura como la noche. Al acercarme y tocar el picaporte de color oro brillante todo desapareció, se esfumó como un humo negro y de repente me hallaba en otro lugar.
Este era apagado y tenebroso, el suelo parecía de tierra y estaba muy sucio. Había puertas en los costados del pasillo, pero estaban cerradas, como si alguien estuvieranencerrado. Todo estaba realmente descuidado y parecía abandonado. Me quedé un momento sin moverme, me sentí con frio y escalofríos horribles. Caminé hacia delante, lo que parecía que me conduciría a la salida, mientras lo hacía se escuchaban gritos de lamento y algunas risas que sonaban disparatadas, me asusté. Seguí en la misma dirección esperando salir de ese lugar, pero llegué al punto de quedar totalmente sin visión, tratando de lograr ver algo más que el intenso negro que me cegaba. Cerré los ojos por un momento, pensando en despertar, y en eso escuché la risita malvada de una mujer cerca de mi cuello que me hizo temblar y dijo:
-El tiempo de servir al que te dio su sangre se agota, no intentes huir, porque no lo lograrás, es tu destino -su voz era ronca y maliciosa.
-¡¿Qué?! ¡¿Quién?! -cuestoné desesperada tratando de ver algo y comprender.
-¡Tú tiempo se agota! -gritó la mujer.
Y en eso un destelló de luz me dejó ver su cuerpo, vestida completamente de negro, pero no su cara, y vi como corría hacia mí con un cuchillo. No tuve tiempo de reaccionar y sentí como el objeto afilado me atravesaba.
Desperté de golpe y estaba sentada, con las manos en el vientre, sudando frio y mi respiración estaba agitada y descontrolada, mis manos temblaban y comencé a sentir las lágrimas caer, no podía controlarlo, era como si todo hubiera pasado y no era un sueño .
-¿ ____? -Draco preguntó medio dormido con su voz ronca, viéndome con los ojos entrecerrados. Se sentó rápidamente al verme en ese estado. -¿Linda? Ey, tranquila -dijo suavemente, tomando mis manos tratando de que dejaran de temblar.
-Yo ...- dije débilmente, respirando más calmada y miré a Draco.
Mis ojos se conectaron con los suyos y sentí tranquilidad al instante. Me dejé caer en sus brazos, puse mi cara en su pecho y rodeé su cintura con mis manos. Él comenzó a acariciarme en cabello y a ratos besar mi coronilla mientras me hablaba, ya que su voz me daba seguridad y me tranquilizaba.
Después de un rato, él me preguntó que pasaba.
-Tuve un sueño -murmure mirando su mano acariciando la mía, él prestó atención inmediatamente-, mejor dicho: una pesadilla, es que, al principio era un sueño sin sentido -expliqué, aun mirando su mano-. Sin embargo, cambió a una pesadilla -tragué duro al recodarlo, y lo peor es que tenía el poder de recordar todo a lujo de detalle, como si me lo hubieran grabado en la mente junto con todos mis miedos y angustias que sentí.
-¿Qué pasaba en tu sueño? en el bueno.
-Bueno, al principio era un gran pasillo, iluminado -quité la vista de donde se posaba y miré a Draco-. Era muy hermoso para ser sincera. Luego vi una puerta oscura al fondo del pasillo y fui a ella, pero antes de que mi mano tocara la manija de oro esta desapareció -mi voz se volvió temblorosa y Draco lo notó instante.
-Puedes contarme lo que pasa después en otro momento, no tiene que ser ahora -propuso él tan gentilmente que una liguera sonrisa surgió en mi rostro.
Asentí con la cabeza. Le quité unos cabellos que tenía en la frente y le di un beso en la mejilla, él sonrió vivamente al igual que yo. Apenas había notado que era de madrugada.
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Hazme suspirar {Draco Malfoy y tú}
Teen FictionNuevo país, nueva ciudad, nueva escuela, nuevas experiencias... pero jamás creí que una de ellas tuviera el nombre de Draco Malfoy. El deseo, el amor, las mentiras y las verdades... Todo será diferente. Y claro, el interés hacia una nueva persona qu...