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Unos cuantos días pasaron hasta que, al fin, el profeta, anunciara lo sucedido en el Ministerio de Magia.

El título era lo más impactante, pronto se convertiría en el primer temor de muchos al verlo: "EL QUE NO DEBE SER NOMBRADO REGRESA". Todo tomó lugar en mi mente aunque realmente nunca hubiera estado en el Ministerio, pero lograba ver una gran fuente de un mago que salía agua de su varita, también una maga que salía agua de la punta de varita y otros seres mágicos. No sabia como lograba formularlo e imaginarlo en mi cabeza aunque nunca estuviera ahí. Luego vi como miles de cristales cayeron, quedando trozos para después ser pulverizados por la fuerza de una varita bastante peculiar... Eso fue todo lo que pude imaginar, no más, fue como si de repente se bloqueara.

Pasé la pagina y al parecer también ocurrido algo más: "Escandalo Mágico: Una pequeña batalla en el departamento de misterios donde tuvo repercusiones, ya que el fugitivo del prisionero de Azkaban: Sirius Black, había sido asesinado por su propia prima, que también era una fugitiva de la prisión, su nombre: Bellatrix Lastrenge".

Llevé mi mano a la boca al poco tiempo de leer el primer párrafo de la primera plana. Sabía que Sirius Black no era culpable de nada, Harry me lo había dejado muy claro, pero tan solo pensar que su asesina fuera de su propia familia y que, estuviera en la misma casa que yo, me hizo estremecerme.

-¿Qué tanto lees ____? -me preguntó la misma mujer que aparecía en el párrafo, entrando en la habitación de Draco, encontrándome en el pequeño sofá que tenía.

-Nada -contesté y rápidamente guardé el periódico.

-Hasta que esos imbéciles dicen la verdad -se burló ella, tomando asiento a un lado de mí-. Ya me estaba cansando su teatrito.

-¿De qué hablas?

-¡Ay niña! ¡Pues del Ministerio! -exclamó con una carcajada exagerada-. Todo el año negaron el regreso del Señor Tenebroso y ahora, míralos, están más asustados que nadie -otra carcajada surgió de su parte.

Fruncí el ceño confundida, ya que no había leído más allá de los de Sirius Black. Comprobé volviendo a mirar el papel: "El-que-no-debe-ser-nombrado regresa".

-Como tú misma lo ves, tu padre, ahora es más poderoso y tiene a toda la gente asustada -se burló con una sonrisa de oreja a oreja-. Dentro de poco él será el mayor mago -aseguró con la mirada perdida mientras jugaba con su varita-. Y tú...

-¿Y yo qué? -arqueé una ceja.

-Estarás al pendiente del viejo ese.

-¿Dumbledore?

-Ahg, si ese -puso los ojos en blanco-. En fin, tu padre tiene mejores planes para ti.

-¿Planes como para qué?

En eso, Narcissa se apareció en el marco de la puerta, interrumpiendo lo que me iba a responder Bellatrix. Nos informó que la cena ya estaba lista y que bajáramos ya, estaba actuando un poco extraño en realidad, jamás la había visto tan evasiva de las miradas.

Miré a Bella, que, aunque fuera algo retorcida y loca, me caía bastante bien, así que movió la cabeza, se levantó y se fue con Narcissa. Les hice caso a las dos, aunque no tuviera nada de hambre y bajamos al comedor.

La incógnita del comportamiento de Narcissa de resolvió al llegar a la planta baja.

Voldemort, mi supuesto "padre" estaba sentado en la cabeza de la mesa del comedor, pero no solo, nunca lo estaba, y con él estaba su serpiente llamada "Nagini"... y mis padres, a cada lado, con la cabeza abajo.

Hazme suspirar {Draco Malfoy y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora