Capítulo 4(Final 3)

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Narra Zulema:

Después de salir corriendo del aquel cementerio con el corazón encogido, necesitaba despejarme y me fui a sentarme a un banco en el que no había nadie.

Me intenté relajar, eran demasiadas emociones en muy poco tiempo, vera otra vez había sido como... algo que no sé explicar, pero ha sido lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo, pero verla así de triste por mi culpa, me hace sentir mal, y eso no me gusta, aunque ya no lo puedo arreglar, es demasiado tarde.

Pasé unos minutos sola, mirando a la nada, cuando de repente se sentó un señor mayor al otro extremo del banco, me pareció extraño pero parecía simpático.

X: ¿hace una buena tarde verdad?
Z: bueno, todo depende de cómo de mire
X:por supuesto
Z: aunque sí, puede que en parte sea un día bonito- sonreí al recordar que la había visto después de tanto tiempo -
X: vaya, al final sí que lo es, ¿algo en especial ha pasado?
Z: puede
X: o mejor dicho...¿alguien?
Z:puede- sonreí -
X: señorita, tengo muchos años para saber que esa cara no es de ver a un amigo, ¿me equivoco?
Z: la verdad es que no, es usted muy listo
X: no hay más que verle la cara
Z: ¿se nota mucho?
X: tranquila, es normal, pero no tengas prisa, las cosas buenas van poco a poco
Z: lo sé, pero ya no hay nada que hacer- agaché la cabeza -
X: tranquila, en un momento llegará alguien que te invitará a salir para sacarte de tu rutina, se reirá contigo frente al mundo, se enamorará de tus gestos, te querrá día y noche, y lo más importante, se preocupará de ti tanto como de él mismo, así que ten paciencia
Z: ya... pero es ella, ella y sólo ella
X:¿ella?, pues, si piensas eso, ¿por qué no vas a por esa chica?
Z: porque... no es tan fácil
X: puede que lo hagas más difícil de lo que puede ser
Z: puede, pero no quiero correr riesgos
X: hija, el amor es de valientes, si no te arriesgas, nunca ganarás nada, y me pareces una mujer muy valiente, no tengas miedo, lucha por ella que nunca es tarde
Z: tiene razón, no tengo ni idea de cómo lo haré, pero lo voy a intentar, se lo prometo
X: mucha suerte
Z: adiós

Este hombre tenía razón, tenía que arriesgarme, sino nunca me quitaría la duda, aunque salga todo mal, pero necesito intentarlo, podía salir todo muy bien, o todo muy mal.

Al llegar a casa, me quise ir a mi cuarto a pensar en cómo podría hacer para que Maca supiese de mí, pero Saray me frenó justo antes.

S: quieta pará', tenemos que hablar
Z: ahora no Saray, estoy ocupada
S: ¿vas a segur escondiéndote del mundo? , o mejor dicho, ¿de Maca?
Z: pues he decidido que no, pero si me dejases pasar a mi habitación a ponerme a pensar en cómo hacerlo, estaría muy bien la verdad
S: coño, vale comadre, anda adelante su majestad

Entré en la habitación y reflexioné sobre todo lo que podía hacer, y me acordé de que Maca tenía un partido en dos días, podría ir a verla, e intentar de alguna forma que me vea, era muy arriesgado pero tenía que intentarlo.

Narra Macarena:

Después de salir del cementerio, me fui a casa a descansar un poco, no podía soportar el vacío que tenía después de tanto tiempo, y sinceramente, creo que nunca lo superaré, ella era única, era simplemente Zulema, y siempre la voy a echar de menos, daría lo que fuese incluso por estar discutiendo con ella ahora mismo, sólo para poder verla, daba igual lo que hiciésemos, pero lo hacíamos juntas, y eso lo hacía diferente.

Al día siguiente me levanté temprano y decidí ir a buscar algún trabajo, si quería quedarme aquí algún tiempo, era mejor que fuese ahorrando, así que salí a buscar algún trabajo sencillo, y después de estar toda la mañana dando vueltas, conseguí un puesto de cajera en un supermercado cercano, la verdad es que fue toda una suerte.

Pasé el día entero con mi hija Rosa, y con Lidia y Estrella, que se habían hecho muy amigas y estaban todo el día jugando juntas.

Hablé por teléfono con Saray, le conté lo del trabajo y estuvimos hablando un poco sobre la cena de mañana.

A la mañana siguiente, me desperté un poco más tarde, hoy tenía el partido y mañana empezaría mi primer día de trabajo de cajera en un supermercado, quería empezar a ganar dinero para ir ahorrando y de momento era la mejor forma.

Pasé todo el día descansando, la verdad es que no tenía muchas ganas de hacer nada, hasta que llegó la hora de cambiarme para irme a jugar el partido.

Recogí algunas cosas y me fui hacia el campo, el resto vendrían más tarde, cuando empezase el partido, yo iba antes para poder cambiarme y tener la charla con el entrenador.

Una vez allí, hablé con mis compañeras, nos cambiamos, el entrenador nos dio las indicaciones necesarias para poder jugar, y finalmente salimos al campo, lo que yo mo tenía previsto, era reencontrarme con Paula, mi gran enemiga desde que empecé a jugar en Madrid, y estaba segura de que no nos íbamos a llevar nada bien.

~

Wenaas :))

En el capítulo de antes elegisteis que subiese un capítulo por día más o menos y así será 😙

alguien de Barcelona para que me lleve a ver a Najwa😭🙏🏼
Maggie está con ella obviamente todo cuadra vaya(que va no lo sé pero ojalá:))

¿conseguirán verde por fin?
¿saldrá todo bien?
¿pasará algo con Paula?

❤️❤️

ZURENA {Del estadio al cielo}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora