Capítulo 58

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Narra Zulema:

Estábamos la rubia y yo sentadas, en medio del bosque haciendo un picnic que yo había preparado anteriormente.

Comíamos, nos reíamos y jugábamos con el gato, hasta que Maca se me empezó a acercar

Z: ¿qué pasa?
M: Zulema...yo creo que ya no puedes negar lo evidente
Z:lo evidente...
M: te quiero- dije suspirando -
Z:- me impactaron bastante sus palabras, así que me armé de valor y le contesté - rubia yo...también te quiero

Y no dijimos nada más, lo siguiente fue un beso muy pasional, pero de repente se separó y empezó a darme palmaditas en la cara, hasta que me desperté.

M:Zulema- dije mientras la movía -
Z:- me toqué la cabeza, no puede ser, ese sueño no era normal -¿para qué me despiertas?- espera, ¿me había quejado de que me despertara? -
M: estabas murmurando cosas sin sentido, no se te entendía nada
Z: era un sueño rubia
M: ¿un buen sueño?- dije con curiosidad, lo único que había logrado entender entre tanto murmullo era la palabra "rubia" y eso me generaba mucha curiosidad -
Z: pues no sabría decirte la verdad
M: bueno, pues yo me vuelvo a dormir que todavía son las ocho de la mañana

Me quedé un rato en la cama, ¿qué coño significaba ese sueño?, yo siempre soñaba con mi hija, por eso me levanto de mal humor, pero me voy arriba de la caravana, me fumo un cigarro y se me pasa, y entonces ya viene la rubia con su gran simpatía matutina y me dedico a molestarla, menos mal que ella se levanta más tarde porque sino tendríamos muchas más peleas, pero desde luego que esto no lo había soñado nunca.

Pasó un rato y me levanté a hacer el desayuno y hice el desayuno favorito de la rubia, a ver si así me perdonaba y se le pasaba ese humor de perros que me llevaba.

Le hice creepes con chocolate, yo me comí los míos y los suyos se los dejé encima de la mesa para cuando despertase, mientras me fui arriba a fumar porque me dolía un poco la cabeza, y me subí al gato conmigo.

Z: Pelusa tio, ¿tu me ayudarás a saber el por qué de estas cosas?- me tiró el cigarro al suelo -oye no, eso no hombre- intenté encenderlo pero sería inútil, estaba todo arañado - esta me la pagas, te voy a comprar un trajecito de esos que llevan las mascotas de los pijos
P:miau
Z:yo no sé ni para qué te hablo, si no puedes contestarme- sonreí mientras le acariciaba la cabeza -pero todo esto es muy raro, ¿tú que crees que debería hacer, porque alomejor conviviendo en la caravana acabamos mal, y tampoco quiero eso- y entonces me arañó el labio haciéndome un pequeño corte - uf, no se puede hablar contigo, eres como tu madre- reí -

Miré la hora y ya eran las 12:00, y pensé en ir a comprar la comida, compré una hamburguesa para cada una y volví a la caravana.

M: gracias por el desayuno
Z: te quejarás
M: la verdad es que te lo estás currando más de lo que pensaba
Z: pues he comprado hamburguesas para comer
M:¿Zulema Zahir?
Z: - la miré extrañada -
M:¿de verdad eres tú?- nos reímos las dos y empezamos a comer -
Z: entonces, ¿con esto ya sirve no?
M: cúrratelo un poquito más va
Z: puta rubia- dije riendo -

Narra Macarena:

Me levanté y me encontré que Zulema me había hecho el desayuno, bueno, era mi desayuno favorito, y con eso ya tenía un gran punto a favor,  me puse a desayunar y recibí una llamada de Saray.

M:Saray
S:¿mejor?
M:¿por qué lo preguntas?
S: aquí una se entera de todo, pero qué,¿ ya habéis hechao' el polvo de reconciliación o que?
M: Saray, te lo juro, no sé de donde te sacas tú esas historias
S: voy a ser vuestra Celestina, y el día de la boda, la oficializaré yo
M: si claro, y tendremos una hija que se llamará Saray- dije irónicamente -
S: de puta madre, voy a ser tita- dije emocionada-
M: Saray de verdad, menuda imaginación
S: si, pero a ti te mola la Zule
M: Saray, ¿para qué has llamado?
S: otra que pasa de la preguntita- reí -
M:¿cómo?- bueno, parece ser que a Zulema también le taladra la cabeza con esto -
S: nada, te llamaba pa' decirte que ya tengo el regalo en mi casa
M: muy bien, recuerda, es en dos días, tienes que llegar muy temprano para prepararlo todo fuera de la caravana, yo le daré una infusión o algo para dormir a ver si así se despierta más tarde y nos da tiempo a montarlo
S: venga va, ¿tú has conseguido lo tuyo o no?
M: que va, si quiero comprarlo tengo que ir a Valencia, pero no se cómo ir sin que se note mucho, no quiero desaparecer todo el día
S: pues vas por la noche, te inventas que te vas tú sola de fiesta y con la excusa pues te vas
M: claro- chillé emocionada - Saray, hay momentos en los que te partiría la cara, pero por cosas como estas te amo
S: nada, aquí estamos, lo que sea pa' que os declaréis de una puta vez, a ver si os animáis ya
M:Saray- dije suspirando frustrada -
S: yo creo que un polvo lo soluciona todo, tú prueba- reí - le dices que la quieres y que te la quieres empotrar y ya
M: ¡Saray!, enserio tus películas mentales sobrepasan mis límites
S: yo iba para guionista, pero me he estancao'
M:- reí - si, un poquito la verdad
S: oye, ¿pero tú la quieres no?
M:- resoplé - Saray tengo cosas que hacer, nos vemos cuando vengas aquí
S: coño, ninguna responde
M: adiós Saray

Colgué muy rápido para que no me dijese nada más sobre el tema, ya ves tú, yo y Zulema, pareja, menuda tontería, en eso llegó Zulema sacarme de mis pensamientos.

Me trajo mi comida favorita, la verdad es que, inexplicablemente, se lo estaba currando.

Comimos tranquilamente, yo me fui con el gato, bueno, con Pelusa,  pobre gato, que nombre tan gracioso le ha tocado.

Zulema se fue a comprar un poco de comida que nos faltaba mientras que yo me puse a ordenar un poco la caravana hasta que vi a una cucaracha.

Narra Zulema:

La rubia se quedó con el gato y yo me fui a comprar comida, cuando volví, la rubia salía de la caravana corriendo y chillando.

M: - chillé mientras salía corriendo de la caravana y vi a Zulema descojonándose en mi cara -¿de qué te ries?
Z: ¿qué haces chillando?- dije mientras paraba de reir -
M: hay una cucaracha
Z: pues ves a matarla
M: no, que vuela y seguro que se me engancha en el pelo, ves tú
Z:¿yo?
M: si, por favor- hice pucheros -
Z:¿si voy me perdonas?
M:si
Z: está bien

Entré a la caravana y maté a la cucaracha, la rubiá respiró tranquila y se fue arriba, yo, mientras, me tomé una pastilla para el dolor de cabeza y me senté en la cama un rato, hasta que oí a la rubia que estaba jugando con la pelota y me asomé por una pequeña ventana a verla, la verdad, ya la había visto jugar, pero verla hacerlo sola era otro rollo, se ponía a hacer toques con la pelota, de vez en cuando hacía alguna cosa rara con el balón y las piernas, algo que seguro que lo intento yo y me caigo, pero bueno, estuve un rato mirándola hasta que casi me pilla, y me puse a leer un rato.

Por la noche, cenamos tranquilamente y nos fuimos a dormir, pero enseguida se subió el gato y me empezó a lamer la mano

Z: ay Pelusa, que asco, no hagas eso- me fijé y la rubia ya se había dormido - no la despiertes que la bronca me la llevo yo

No pasó nada más, el gato se me acurrucó en el brazo y finalmente me dormí.

~

Aquí tenéis otro cap😙

Dejo que me matéis venga :)

¿Conseguirá Maca el regalo de Zulema?
¿Seguirá Saray con sus sugerencias?
¿Conseguirá Saray lo que tanto quiere?"y vosotros también:)"

❤️❤️

ZURENA {Del estadio al cielo}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora