Sweet Pain | Gay |

23

Sage tomaba respiraciones lentas tratando de relajarse, a la vuelta del pasillo se encontraba Evan.

Estaba decidido a pedirle que saliera con el, estaba dispuesto a darse una oportunidad, a Evan y a el mismo.

Con un pesado suspiro, tomó fuertemente las asas de su mochila y dió la vuelta para mirar a Evan riendo con dos de sus amigos, decidido pero a pasos precavidos se dirigió a ellos, estaba a punto de llegar hasta que miró como una chica con el cabello hasta la cintura se acercaba a el colgándose de su brazo.

Debía aceptar que su pecho se había oprimido al verlo sonreirle abiertamente, no se veía incomodo para nada, observó como intercambiaron un par de palabras y ella se fue.

Suspiró nuevamente y retomó su paso hacia el castaño.

-E-Evan.

El chico se giró para encontrarse con la mirada del menor.

-Sage... Tu... ¿Teñiste tu cabello? -preguntó sorprendido.

-si... Aam, ¿te gusta?

-te sienta el negro, claro que si,te hace ver más pálido... Pero hasta eso te queda genial.

Los de amigos de Evan se dirigieron miradas cómplices y se alejaron de ahí, dejando a ambos chicos solos.

-¿enserio?-preguntó poniéndose tímido.

-sip, y ¿qué querías? -preguntó sin borrar su sonrisa.

-yo... Bueno, es que... Es que yo... Aaam.

El ahora pelinegro frunció el ceño algo frustrado, no entendía por qué estaba tan nervioso.

-aam, quería invitarte a salir, pero... Pero no creo que a tu novia le agrade la idea ¿cierto?

Evan levantó una ceja e inclinó la cabeza tal como un cachorrito.

-¿novia?

-si, este... Te vi hace un momento con una chica y pensé que tal vez tu...

-no no no. -dijo rápidamente.-Addison no es mi novia, es solo una amiga.

-oh, entonces... ¿Te gustaría ir hoy a algún lado?

-¡claro! Me encantaría, lo sabes.

-bien, y ¿a dónde te gustaría ir?

-aam, bueno, tal vez podríamos ir a tomar algo, ¿te parece bien?

-claro, sencillo y agradable. -sonrió.

-bien, ¿esta tarde?

-si si, esta tarde.

-genial... ¿Nos vemos a las 3?

-a las tres. -asintió sin dejar de sonreir.

-perfecto.

Evan miró a todos lados y con los nervios a flor de piel, se acercó para dejar un beso en la mejilla del pelinegro.

[🤍]

-uuuy, ¿y esa sonrisa? -preguntó Kenya cuando vió entrar a su amigo con una enorme sonrisa.

Lee rió nervioso y se sentó al lado de Niko.

-bueno, digamos que... ¡Ya tengo novio! -exclamó sacando el collar que se encontraba escondido debajo de su camiseta.

-¡oh por dios! -gritó el rubio para después tapar su boca con sus manos.