El domingo por la tarde, Sage terminaba su tarea con tranquilidad, había hablado un rato con Evan, lo que lo mantenía relajado.
Pero, por su cabeza no dejaba de pasar la imagen de su hermano, la situación le estaba comiendo el cerebro, se sentía tan culpable, y es que no era para menos.
Suspiró dejando la pluma sobre la mesa y estiró sus músculos en busca de destensarlos, se levantó, se dirigió a la cocina y abrió el refrigerador para sacar uno de los brownies que Lee amaba tanto, lo colocó sobre una servilleta y subió las escaleras.
Se detuvo frente al cuarto de su hermano y con los nervios de punta, tocó la puerta esperando respuesta.
—pasa papá.
Sage no dijo nada y solo abrió la puerta entrando a la habitación.
—¿qué? ¿Qué quieres? Sal de aquí.—soltó el castaño confundido y molesto.
—yo... solo quería traerte esto.—le mostró el brownie entre sus manos mientras se acercaba a él con cautela.—recordé que aún quedaban unos pocos y pensé que te gustaría uno.—musitó.
—pues no quiero, ahora vete.—se recostó dándole la espalda.
—Lee...
Aún inseguro se sentó en la cama del castaño, justo a su lado, soltó un suspiró y empezó a hablar.
—lo siento, de verdad lo siento mucho, sé que cometí un error enorme, y te juro que me arrepiento muchísimo, así como se que Jackson también lo hace. Lee, entiendo que me odies, de verdad lo hago, hasta yo me odio, pero por favor... habla con Jackson, dale la oportunidad de ser escuchado, tal vez no soy el más indicado para decirte esto pero, Jackson te ama, el fue el que me pidió que dejáramos todo porque quería ir enserio contigo... si sirve de algo, todo eso pasó antes de que su relación fuera algo formal, no duró mucho, te lo prometo, solo pido que lo escuches, te ama y te extraña mucho, estoy seguro Lee, y también se que si le das una segunda oportunidad el no va a desaprovecharla.
El castaño no volteó, simplemente lo escuchó aún en su pose anterior.
Sage suspiró y asintió.
—solo... quería decirte eso, dejaré el brownie aquí en caso de que quieras comerlo.
Se levantó y se dirigió a la puerta, yantes de abrirla, añadió.
—se que no he sido el mejor hermano, pero me gustaría enmendar mi error... y tal vez intentar reconstruir nuestra relación, solo si tú me lo permites.
Abrió la puerta y se fue a su habitación.
Lee sorbió por la nariz, limpió las escasas lágrimas que lo habían traicionado y se sentó en la cama, dirigió su mirada al buró, donde se encontraba el brownie, lentamente lo tomó y le dió un mordisco.
[🤍]
Jackson observaba cómo el rubio corría por la arena de aquella hermosa playa, una gran sonrisa se formó en sus labios cuando lo vió acercándose a él con la misma expresión.
—mi amor, vamos al mar, por favor.
—Nath, sabes que no me gusta entrar al mar.
Nathan hizo un puchero y se sentó a su lado.
—¿por qué esa carita? ¿He?
Jackson suspiró y sonrió falsamente viéndolo.
—¿Lee todavía no quiere verte?
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Sweet Pain | Gay |
Любовные романыSage y Lee son gemelos, tan diferentes pero iguales a la misma vez. Su familia encabeza la lista de las familias más ricas de East Valley, una gran y hermosa ciudad. Esta familia es sin duda lo que encontrarías si buscas la palabra "perfección" en e...