Sweet Pain | Gay |

39

Lee bajó de la motocicleta de su novio frente al estudio, le sonrió siendo correspondido por el rubio.

—Gracias por este día, y por escucharme.—pronunció el mayor.

—gracias a ti por haber confiado en mi, mi amor, no sabes lo que significa para mi, quiero ser tu refugio cada vez que pueda, nunca dudes que voy a estar siempre para ti ¿si?

Jackson asintió sin poder borrar la sonrisa de su rostro.

—te amo, creo que será mejor que me vaya, no quiero que tu padre me encuentre aquí.

—si, nos vemos, yo también te amo, mándame mensaje cuando llegues a tu casa ¿si?

—si capitán.—infló su pecho y colocó su mano sobre su frente como todo un soldado, Lee rió y formó un puchero con sus labios.

—¿me das un beso antes de irte?

Jackson bajó su mano y como todo loco enamorado asintió.

—lo que mi ángel pida es suyo.—acarició la mejilla del castaño y lo acercó para poder dejar un pequeño y suave beso sobre sus labios.

Jackson estuvo a punto de irse hasta que ambos divisaron el cuerpo de alguien observándolos.

—papá...

—hola cariño.—saludó relajado acercándose.

Jackson sintió sus nervios subir por todo su cuerpo.

—hola, me presento, soy Sky, el padre de Lee, creo que no nos conocimos en muy buenos términos.

Jackson boqueó nervioso y de la manera más torpe del mundo bajó de su moto, se colocó frente al hombre bajito y le tendió la mano educadamente.

—J-Jackson, señor, Sky, señor...—tartamudeó.—un gusto...

Sky rió y tomó con gusto la mano de su yerno, Lee los observaba confundido y nervioso a la vez.

—p-papá.

—un gusto Jackson.—soltó la mano del chico y se acercó a su hijo acariciando su cabello.—será mejor que regresemos a casa ¿si? Papá está a punto de llegar, hice brochetas de pavo para cenar, tus favoritas.

Lee asintió y sonrió aún confundido, miró a Jackson quien se encontraba igual o peor que el.

—s-si... Jackson, me voy...

—si amor, digo Lee...—se corrigió rápido, no quería causar problemas con su suegro.

Lee volvió a asentir completamente perdido y siguió a su padre al auto.

Jackson subió a su moto y se fue de regreso a casa.

Cuando padre e hijo estuvieron en el carro, Lee no quería hablar pero necesitaba respuestas.

—papá...

—hijo, está bien, llamé a Marie para pedirle que no te exigiera demasiado hoy, pero me tomó por sorpresa cuando me dijo que no había habido ninguna clase extra, así que supuse que te habrías escapado con ese chico.

—papá lo siento, yo te...

—déjame terminar.

El menor cerró la boca abruptamente y asintió acomodándose en su lugar.

—le dije a tu padre que estaba fuera de la casa así que aprovecharía para recogerte yo mismo.—por un momento hubo un silencio, silencio que Lee deseaba con su alma que terminara, solo esperaba que su padre le gritara en la cara, porque había comenzado a sentirse culpable.—Lee, entiendo lo que está pasando, sé que lo quieres mucho y no quieres estar lejos de él, pero mi vida, esa no es la manera.