� 𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟯𝟵

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Como antes

Esa noche Yeonjun fue a su habitación y con el corazón roto se preguntaba qué cosa había pasado para que se encontrara en esa situación. La noche pasada le estaba contando a su padre acerca del bonito chico del cual se había enamorado y tan solo un día después estaba en su cama junto con su pobre gatito, lamentándose por todo.

No lloró. Por mucho dolor que hubiera sentido, no se atrevió llorar por mucho que pensaba en ello. Sus ojos le picaban, pero creía que con el ridículo que hizo frente al Hufflepuff lo hacía  parecer un poco necesitado, con eso ya era suficiente.

Por un momento creyó poder dejarlo pasar, pero estaba más que equivocado.

En los siguientes días solo admiró como Soobin parecía sumamente tranquilo, como si no ocurriera nada. Nada de nada. Solo pasaban los días y veía como se volvía a reunir con sus amigos, como se hacía amigo de esa fastidiosa Jisu cada día más y como la reluciente sonrisa de meses antes volvía a relucir en el castillo.

No lo había notado antes, pero ahora sí que notaba la diferencia. Desde que algo surgió entre Soobin y él, Beomgyu y Kai se habían alejado bastante del Hufflepuff. Tanto que ahora que los veía más unidos de nuevo, hablando y jugando como antes, se le hacía bastante raro. Era como si hubiera tomado una maquina del tiempo y hubiera atrasado todo hasta tercer año o quizá dentro de los primeros dos meses de este curso. Se sintió apartado de nuevo, como había iniciado. Tampoco se había dado cuenta que también se había alejado de Taehyun y en realidad ya no se hablaban demasiado. Aparentemente él y Kai habían construido una buena amistad desde que Yeonjun decidió apartar algunas cosas de su vida.

Al menos Taehyun si podía hacer buenos amigos.

Él se la había  pasado pegado a solo una situación que se había olvidado de todo.

Incluso recién se daba cuenta que Yeji ya no estaba presente entre las clases y comidas con él. Hasta comenzaba a extrañar su estúpida y chillona risa y sus tontos métodos de coqueteo.

Había sido un tonto con ella. Se daba cuenta de eso y quería asesinarse  en ese preciso instante. 

Pasaron los primeros exámenes del año y como siempre Soobin obtuvo el primer puesto en calificación entre los de su año y casa. Obviamente el profeta tenía que poner eso en su artículo y la gente estaba más confiada en que Soobin cumpliría la famosa profecía.

¿Y él?

Bueno, haber obtenido noventa puntos no había sido tan malo, tomando en cuenta su mala pronunciación en latin y su impaciencia para aprender había sido un milagro.

El año pasado había obtenido noventa y tres, pero prefería no pensar en ello.

Comenzaba Diciembre y las luces navideñas aparecieron, al igual que las preciosas decoraciones y la sensación mágica que se sentía al notarlas.

Yeonjun no había pensado en ello para entonces, claro estaba. Solo recordaba las crueles palabras de Soobin y como le había dejado en claro que quería estar bien con él. Pero,

¿Bien de qué manera?

No se atrevía ni a mirarlo. Solo pasaba a su lado con su sonrisita y sus dulces  risotadas mientras miraba atento o a Beomgyu, o a Kai, o a Jisu. ¡Incluso a Minho, que era dos años mayor!

𝐓𝐒𝐓𝐀𝐒𝐇; YJ & SB Donde viven las historias. Descúbrelo ahora