� 𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟰𝟱

129 14 11
                                    

Dos besos.  Dos confesiones.

Lia se la había pasado explicando a Yeonjun el porqué no debería dejar sus sentimientos por Soobin, trató de calmar a su compañero de casa como le fue posible. Y aunque hubieran costado lágrimas, desahogos y discursos emotivos, la Slytherin al final lo logró.

Yeonjun decidió hacer otro intento para confesarse, pero sería quizá dentro de otros meses más, el desgaste del chico después de ese día lo había agotado y desilusionado un poco.

Jisu se fue de ahí con una sonrisa en los labios, le deseo suerte y desapareció. El Slytherin la había estado decaído mucho desde que vió la conexión que tenía con Soobin, pero después de esa noche supo que nunca hubo un porque de haberla despreciado tanto.

Los siguientes meses fueron demasiado rápido. Sin haberse dado cuenta, ya estaban a una semana de finalizar con el año escolar.

El enfrentamiento de Hufflepuff contra Ravenclaw fue agobiante y la final fue Slytherin contra Hufflepuff. Por muy poco, los de uniforme amarillo ganaron y se llevaron la victoria ese año.

Hyunjin, como era costumbre, regañó a todos por no haber puesto más empeño en el juego y se volvió loco después de no haber ganado. Era su último año en Howgarts, así que estaba demasiado frustrado. A pesar de  ello, sus compañeros de equipo trataron de animarlo  para entonces.

San Valentin fue toda una cursilería y lo único eterno fueron las vacaciones de pascua. Kai no lo volvió a mirar de nuevo, y aunque sabía que tenia mucho sentido por lo que había hecho, le había dolido el rechazo.

Por otra parte, su amigo Taehyun se había hecho muy amigo de Huening , volviéndose incluso más unidos que la amistad inicial que Kai tuvo con Beomgyu y Soobin.

No habían cambiado mucho las cosas.

Era un día cualquiera del caluroso y húmedo Junio, a punto de entrar a Julio en pocos días. Todos hablaban de la celebración de final de curso y sobre quién ganaría la copa de las casas.

Habían terminado las clases, era un día relativamente nublado. Yeonjun estaba caminando por los pasillos, tratando saliva, en cuanto viera a Soobin, tomaría su mano y sin soltarlo, iba a proceder a hacer su confesión, esta vez no lo dejaría ir.

Habían pasado minutos, el rostro de Soobin no aparecía y estaba comenzando a arrepentirse, pero de pronto lo vió y sabiendo que era ahora o nunca, fue  a  toda  velocidad tras él y tomó su mano, como tanto había planeado.

—¿Oh..? —Volteó el Hufflepuff a mirarlo —¿Yeonjun?

El chico no respondió, solo jaló el brazo del más alto y lo obligó a seguirlo, siendo así llevado a un sitio en donde a Yeonjun se le juntaban las mariposas en su estómago. Soobin estaba preguntando mientras trataba de soltarse de su mano, pero como Yeonjun había prometido

Está vez no lo iba a dejar ir

Era el sitio en donde para él, había comenzado todo. Todo de todo.

Era el casillero donde guardaban las cosas de limpieza, tan pequeño y nada espacioso, hizo que Soobin entrara ahí sin vacilar.

Él también entró, cerró con rápidez la puerta, y a oscuras, miró el rostro indescifrable de su amado.

—D-debo decirte algo importante —A penas podía respirar, no sabía si era por el espacio pequeño o porque como la primera vez que los dos habían estado ahí, huyendo del ataque de un dementor, los labios de Soobin se veían realmente irresistibles.

𝐓𝐒𝐓𝐀𝐒𝐇; YJ & SB Donde viven las historias. Descúbrelo ahora