Siénteme ©

🍏 Capítulo XLVI

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           Capítulo XLVI

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Moví los pies, estiré el cuerpo antes de levantar el tronco topándome con mi ojo devolviendo el gesto, sonreí sin poder evitarlo mucho. Con aquel retrato me pasaba lo mismo que con Marcos; cada vez que lo miraba, me perdía en aspectos ocultos, nuevos que aumentaban mi gusto.

Cuando salí del embrujo me dispuse a prepararme, pues, debía ir al hostal con todos y saldría en la tarde con el profesor, no de forma común, notoriamente, estaríamos en su auto, pero disfrutando de vistas más agradables que un estacionamiento.

Al salir de la ducha recibí un mensaje del dueño de mis pensamientos.

Marcos

Hola preciosa, ¿Cómo estás?
¿Cómo amaneces? 7:14 Am.

Jaque

Hola amor, estoy muy bien, dormí como un 🐨, el alcohol debió
ayudar, eso al igual que la plenitud.
Anoche fue maravilloso, se
hubiesen quedado, algo
haríamos para acomodarlos.
¿Tu cómo estás? ¿Descansaste?
Sabes, una de las primeras cosas
que vi hoy fue el cuadro,
es precioso, te lo dije ayer,
pero te lo repito, me encanta.
No más que tú, por supuesto,
aun así me fascina.
Gracias 💛. 7:14 Am.

Marcos

No es nada, princesa, es un honor
poder regalarte algo, lo es más el
que te guste.

Por cierto, recuerdas que anoche, no
quise pasar las fotos de la galería,
bien, era por eso, tenía la imagen
que me había enviado el artista
y, también varias fotos tuyas de las cuales no tienes idea de su existencia.
Son imágenes normales, impulsadas por lo del cuadro, Michael necesitaba captar varios ángulos, pero al no tener explicación de ello, al no podértela dar ayer, podías
pensar que soy un acosador o algo.
No te mentiré, se me hizo algo extraño al principio, pero después disfrutaba captar tu perfil o algún mohín, tengo buen material 😉. 7:15 Am.

Ahí estaba la explicación de su actitud, estaba asombrada, aunque tenía razón en varias cosas: para hacer el retrato se necesitaban imágenes, especificas, si lo hubiese visto ayer, antes del intercambio no habría tenido explicación, asimismo, la sorpresa estaría arruinada. Por otro lado, aquello del material me dejaba pensando muchísimo.

Marcos

Yo estoy bien, también dormí profundamente, a pesar de echarte de menos.
Quería preguntarte algo, hoy, en lugar de quedarnos en el auto, ¿te gustaría ir conmigo a casa de un amigo?
se llama Ángel, te he hablado de él, me encantaría presentarlos. 7:15 Am.

Me parecía un plan excelente, poder conocer a quien él tanto respetaba, a quién ayudó a que decidiera apostar por lo nuestro, debía agradecerle, de paso.

Jaque

Primero, deseo ver ese material.
Segundo, me encanta pensar que
voy a conocer a Ángel, perfecto.
¿Qué puedo llevar para él? 7:15 Am.

Marcos

No te preocupes, llevaré algo.
Posdata: También te lo dije ayer, te lo
repito hoy, me encantan mis regalos, llevó dos de ellos, de hecho. El tercero no se salva esta noche. 7:16 Am.

Gocé desde tan temprano de una visión maravillosa, pues el profesor envió una foto suya con el suéter que le di la noche anterior. Retorné a aquel momento en el tiempo, a su rostro contento por recibir aquello, le precedió la representación de su expresión complacida por el segundo paquete que contenía una botella de vino tinto Casa Madero 3V que era su favorito, unas tostadas que venían en la ancheta y queso, finalizando en su mueca de estupefacción al  tener en brazos el tercer objeto.