45. Lejos, solo y con el corazón roto.

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Especial Josh 3/3


Cuando regresé a la sala donde estaban los niños y los gemelos todo parecía relativamente normal. Ignacio no había dicho nada, bueno, incluso él probablemente no hubiera adivinado con quién estaba hablando.
Amelia jugaba con los niños de Eva, la hermana de Ignacio, aunque el mayor en realidad estaba bastante distraído con su celular.
—¿Es la primera vez que nos vemos? —consultó León. Negué con mi cabeza, no era la primera vez, lo había visto aquella noche, cuando la relación de mi amigo y el mocoso se había ido por la borda… por su culpa. —No me acuerdo de ti… —dijo pensativo.
—Nos vimos una noche en que estábamos en casa de los muchachos, pero fue un caos así que supongo que
—Oh… ya recuerdo —sonrió amable. Me abstuve de rodar los ojos, en serio, ese muchacho era un cínico. —¿Así que eres el novio de Tiziano?
—Lo soy.
—Es increíble cómo todos terminaron teniendo parejas de su mismo sexo ¿No? —lo observé con cuidado. León largó una carcajada y miró a su gemelo que parecía realmente interesado en la película que corría en la pantalla. —¿Recuerdas cuando Nano nos contaba cómo eran de mujeriegos todos ellos Gael? —volvió su mirada a mí. —Ellos eran todos unos casanovas ¿Sabes? Es simplemente raro que ahora todo se haya tornado así.
—Sé cómo eran —dije tranquilo. —Yo solía ser amigo de Rocco.
—¿Realmente?
—Aún lo somos.
—¿Tenías en la mira a Tiziano hace tanto tiempo?
—Era irresistible en ese momento, pero fuera del radar de Josh por supuesto —fue mi novio quien respondió por mí. Se sentó a mi lado y me abrazó por la cintura para acercarme a él. —Sus estándares eran bajos en ese momento, y a mí sólo me gustaba jugar.
—Pero, siendo serios ¿Cómo es que terminaste con él Tiziano?
—Estás siendo grosero León —interrumpió Ignacio llegando al lugar. Su gesto seriamente enojado.
Él se colocó tras Gael y masajeó los hombros del chico quien no había cambiado su expresión en ningún momento, él ni siquiera estaba prestando atención la charla que llevaba su hermano conmigo, o por lo menos, eso es lo que me pareció a mí.
—Sólo soy curioso —se defendió León de inmediato, dolido. —Me llama la atención que todos terminaran teniendo gustos iguales.
—No me gusta Josh por ser hombre si es tu pregunta —dijo Tiziano apretándome más a él. —Me gusta porque es simplemente él. Me gusta siendo irónico y cariñoso, me encanta de malhumor y de buen humor. Pasa del género ¿Sabes? Si Josh fuera mujer sería lo mismo… porque lo quiero a él.
—¿No es eso ridículo? Tiene un
—Suficiente —cortó Ignacio. En serio se lo agradecí. —No tiene porque importarte lo que pasa en la cama de los demás León, sólo en la tuya. Estás siendo grosero con mis amigos, si tienes dudas de tu orientación sexual consulta con un experto.
—¿Dudas? —quiso saber casi asqueado. —No es eso, quiero entenderlos, nada más.
—A mí no me molesta —dije encogiéndome de hombros, pero Ignacio sólo negó con su cabeza.
—León está siendo molesto porque no comprende cómo pueden sus gustos y los míos se diferentes, eso es todo —respondió Gael apático. —Pero ya te he dicho muchas veces que no soy gay.
—¿No es esa la respuesta que me dio Tiziano? —continuó el muchacho girándose a Gael. —¿Eres igual que él entonces?
Gael no respondió, en cambio, le subió el volumen a la televisión. León, se giró a mi novio.
—¿No tiene un nombre eso? —Tiziano se encogió de hombros. —¿O es sólo una fase adolescente?
—Para otros quizás sí, pero aquí, mi novio, está lejos de la adolescencia —respondí sintiendo la pesada mirada de Gael en mí. Idiota. —Experimentar no está mal, tú sabes, pero si involucra a otras personas entonces sí lo está. Quizás por eso lo esperé tanto después de todo.
—Tú no me estabas esperando, maldito —rió Tiziano buscando mis labios para besarlos.
Afortunadamente Nano y la pareja de Eva aparecieron en ese momento para solicitar ayuda con la cena. Me moví rápido, fuera de la mirada de Gael. Claro que Tiziano fue tras de mí y me dio una cálida advertencia, lo que había dicho no había pasado desapercibido para él, pero el mocoso se lo merecía, él mismo había dicho que “no era gay”. ¿Qué significaba eso de todos modos? Idiota.
Para colmo de males, luego de la cena, los gemelos se fueron con nosotros. Tiziano volvió a llevar adelante la charla, pero estaba vez no fue con Gael y no tuvo nada que ver con orientaciones sexuales… afortunadamente. Ellos hablaron de la carrera de León y los planes de éste. Intentaron integrar a Gael, ambos, pero el chico ni siquiera se molestó en dar monosílabos.
Cuando nos detuvimos en su departamento León descendió de inmediato, pero Gael no lo hizo. Me giré a ver qué iba mal y me encontré con su mirada otra vez.
—No estaba experimentando.
—¿Disculpa? —consulté.
—Josh —advirtió Tiziano.
—No soy un adolescente, no estaba experimentando.
—¿No?
—Cariño…
—Porque mi amigo es un hombre ¿Sabes? Y estar con él en realidad te hace gay… pero tú no eres gay ¿O sí? ¿No dijiste eso?
—¿No dijo tu novio que no se trataba de eso?
—Sí, bueno, mi novio está conmigo ¿Ves a Alex por aquí?
—Josh —insistió Tiziano con más contundente. Rodé los ojos antes de girarme de nuevo al frente. —Josh extraña mucho a su amigo, no es nada personal…
No supe si el chico hizo algún gesto o murmuró algo, lo próximo que oí fue la puerta del vehículo abrirse y cerrarse. Agradecí que Tiziano no dijera nada de eso, agradecí que supiera que no era una buena idea defender al muchacho justo en ese momento. Cuando llegamos a destino él solo me abrazó hasta llegar al departamento y me acercó a su pecho mientras ponía una película tonta para distraerme. Me gustaba que él supiera lo que necesitaba en momentos como ese, me gustaba que hubiera llegado a conocerme tan bien.
Claro que no me salvaría de esa charla al día siguiente, eso era algo que él y yo sabíamos, así que me desperté temprano para preparar el desayuno y esperarlo en la mesa. Tiziano sonrió y dejó el espacio para que fuera yo quien sacara el tema, debió esperar bastante vale decir.
—Me comporté como un niño peleando con otro niño. Sé que tengo casi diez años más que Gael, pero no me voy a disculpar con él. Es lo que pienso y ciertamente no me agrada.
—Te agradaba antes.
—Si, cuando no sabía que él estaba jugando con Alex.
—Alex es un adulto Josh, sabía en lo que se estaba metiendo, y él se sentía bien con eso —dijo con calma y paciencia. —Y sí, Gael es un crío aún, pero no creo que sea tan malo como crees.
Rodé los ojos.
—Que lo defiendas y que te agrade no ayuda en esta situación —murmuré por lo bajo. Sí, yo estaba actuando como un niño y lo sabía. —Pero como sea, no es necesario que lo siga viendo tampoco… además Alex está bien.
—Amelia gritó muy fuerte que estabas hablando con un tipo guapo llamado Alex —avisó con cuidado. Lo observé invitándolo a explayarse. —No es como si eso hubiera molestado a alguien, pero sí se produjo un silencio incómodo en la sala. Nadie dijo nada, no estoy seguro de si los demás saben que Alex no está en el país.
—No deberían porque saberlo ¿o sí?
Tiziano me observó con su mirada tranquila antes de inclinarse a dejar un beso en mis labios.
—Sé lo que se siente extrañar a un hermano, y sé que mi situación es distinta porque Lucas está cerca ahora, pero antes no lo estuvo y yo no tenía a nadie… bueno, sí, tenía a los muchachos, pero tú sabes lo que quiero decir —dijo tomando mis manos entre las suyas. —Me tienes aquí, contigo, y tienes a Milo y a Nash también. No estás solo.
—Yo sé eso —dije bajando mi mirada. —Sé que no estoy sólo, pero Alex lo está.
Observé su rostro justo en el momento en que la comprensión lo inundaba.
—No es por mí, es por él. Está lejos y está solo. Es un adulto y es bastante más responsable que cualquiera que nosotros, lo hará bien un tiempo, pero no sé cómo lo hará luego porque nunca estuvo lejos, solo y con el corazón roto.
—Entiendo —suspiró acariciando mi rostro. —Lo lamento, estaba pensando en ti y no en lo que le pasa a Alex.
—Está bien, no pasa nada.
—Oye, pero en octubre yo tengo una semana libre ¿Qué te parece si vamos a visitarlo?
Me reí fuerte antes de ponerme de pie para ir por más café. Pero cuando volví Tiziano me observó alzando sus cejas.
—Estoy ahorrando Tiziano, no llego a octubre y no quiero pedirle más dinero a mi tío —dije volviendo a sentarme. Había conseguido un pequeño empleo, nada que destacar, pero algo que me permitía ahorrar.
—No tienes que pedirle a él bebé, yo trabajo y tengo ahorros, eso sin contar que pudo usar el dinero que me dejó mi padre biológico… te quiero invitar.
—No me gusta eso de
—Josh. Eres mi novio. Eres mi compañero y quiero invitarte, quiero que estés bien y un viaje así te hará bien, y espero que algún día cuando tengas un buen trabajo hagas algo similar por mí, eso es todo. Deberías aceptarlo sin chistar —se quejó poniéndose de pie. Besó mis labios, sonrió una vez más y se dirigió a la salida. —Averiguaré todo y en menos de lo que piensas estaremos con Alex, y no, no aceptaré un no por respuesta.
—Tú nunca me has escuchado de todos modos.
—Leo tu cuerpo Josh, y tú quieres esto tanto como me quieres a mí.
Quise responderle, pero él fue más rápido y se retiró del lugar. Tiziano siempre había sido rápido y por esto me había atrapado tan fuerte.

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