DÉJAME CUIDARTE

Hola Miami, adiós cordura.

Maratón 2/3

Poché POV

¿Ya estás lista?- entró Laura espantándome.- perdón.

Si ya. Vámonos.- empecé a caminar sintiendo sus pasos detrás mío. Llegamos a donde había estacionado el chofer y subimos al auto, al parecer ya sabía la dirección porque arrancó de inmediato.

Te tengo una buena noticia.- Dijo volteando su cuerpo.- Calle me dio el día libre para cuidarte, así que hoy será noche de chicas.

Increíble como no se da cuenta que no puede caerme peor.- Te lo agradezco pero no hace falta, no estoy inválida. Necesito descansar.- ni volteé a mirarla, no quería.

Bueno tu descansa y yo estaré por ahí, tal vez pueda cocinarte algo.- Su felicidad y ánimo por pasar lo que quedaba del día conmigo se me hacía tan raro.

De verdad no quiero ser grosera pero prefiero estar sola.- si volvía a insistir no respondía.

Yo tampoco quiero ser grosera pero sigo órdenes, y mi trabajo es cumplirlas.- la fulminé con la mirada y ella solo esbozó una sonrisa.

Yo también soy tu jefa, deberías seguir mis órdenes al igual que las de Daniela.- tenía razón, y no podía negarlo.

En mi contrato especifica, que si una regla dada por una jefa anula la de otra, automáticamente es inválida.- me cago en todo.

Saliste obediente.- Fue lo último que dije antes que el chofer nos avisara que habíamos llegado. Salí del carro hacia la entrada a pasos rápidos, al sacar las llaves ya tenía a Laura al lado mío. Definitivamente no se iba a ir.

Al abrir la puerta le hice un gesto con la mano para que pasara, y así lo hizo. Entró admirando alrededor de la casa, para por fin sentarse en el sofá de la sala.- Siéntate, estás en tu casa.- comenté con sarcasmo.

Es muy acogedor este lugar. ¿Te gusta mucho vivir aquí?- preguntó interesada.

En realidad no tuve opción, me encargaba de una empresa en Paris pero hubieron algunos inconvenientes y tuve que regresar a New York.- ella solo escuchaba, sin tratar de preguntar qué fue lo que paso.- pero por otro lado fue algo oportuno, así puedo estar más tiempo con Vale.

Hablando de ella.- dice buscando el control de la televisión.- ¿Dónde está? Me gustaría conocerla.- Su pregunta me recordó lo extraño que era que Vale no bajara hasta ahora, a ella siempre le ha gustado conocer gente nueva, y por su costumbre de estar escuchando conversaciones ajenas, ya debía saber que había visita.

Debe haber salido, últimamente anda media ocupada en cosas que no quiere contarme.- Me examinó con la mirada.

¿Tú crees que algún día pueda hablar con ella?- No entendía su necesidad.- Es que tengo una hermana menor también, y le cuesta mucho socializar. Pienso que sería buena idea presentarlas.

Claro, no hay problema.- Traté de sonar lo más cortés posible.- Bueno ya que estás aquí hagamos algo.- Me acomodé en el sofá junto a ella.

Veamos una película.- Entró a Netflix revisando el catálogo.- ¿Qué género prefieres?

Algo de comedia, necesito despejarme un poco.- me hizo caso de inmediato y puso "Donde están las rubias", algo clásico, me gustaba.- Iré a preparar palomitas.- me tomó del brazo haciendo que me volviera a sentar.