DÉJAME CUIDARTE

Imposible de aguantar

Maratón 1/3

Después de terminar de almorzar, quitamos la película para disponernos a prepararnos para la reunión que comenzaría en pocos minutos. Daniela se encontraba revisando unas fotografías que se habían tomado en la sesión que se hizo hace unas semanas. Mientras que yo contactaba con todos los números de su lista para apartar el salón de eventos, y firmar el contrato con todas las empresas que trabajarían con nuestras secretarias para la decoración.

¿Crees que puedas hablar con Paula para organizar otra sesión de fotos?- preguntó sacándome de mis pensamientos.- Siento que necesito más material.

Claro, lo haré.- respondí con una sonrisa ladeada. Si bien mi ex mejor amiga y yo no habíamos logrado arreglar nada entre ambas, esta vez la buscaría por temas de trabajo, eso sin contar que soy su jefa, y ella debe obedecerme.- Los del cátering me confirmaron que ya nos agendaron para ese día, así que ya está cubierto.

Perfecto.- siguió viendo y examinando las fotografías.- Recuérdame pasarle el número a las chicas para que se comuniquen y arreglen todo con ellos.- asentí en respuesta mientras lo anotaba en mi agenda digital. Sentí su mirada sobre mí, y levanté la mía.- Extrañaba esto.

¿Qué?- no entendía a qué se refería.

Trabajar contigo, tener un apoyo, ser un equipo.- explicaba cada cosa que decía exageradamente con sus manos, lo cual me resultó chistoso.- Se siente increíble no tener todo el peso de las cosas por un momento.

No sé cómo soportaste tantos años manteniendo ese peso.- comenté viéndola bajar su mirada y colocarla en cualquier otro lado que no fuera yo.

Bueno, uno tiene también que saber estar solo, y fue lo que me tocó.- y la admiraba por eso. Como dije desde que me enteré, yo me hubiera orinado en los pantalones al recibir sobre mis hombros una responsabilidad tan grande como mantener una empresa. Si bien es cierto mi papá me hacía encargarme de algunas, pero en el fondo yo siempre sabía y era consciente que cualquier error que cometiera, él estaría ahí para enmendarlo. En cambio ella no, literalmente sería su culpa si H&M se iba a la quiebra o si se convertía en una de las mejores empresas a nivel internacional. Y por lo visto con todo lo que ha hecho, solo está logrando conseguir lo segundo.

Me da gusto que seas independiente, pero no está mal dejarse ayudar de vez en cuando.- quise aconsejarle de la forma más sincera que pude. No voy a engañarme, me sentía una completa estúpida desde que entré a su oficina, o más bien desde que ella entró a la mía. Se suponía que no caería, se suponía que estaba furiosa con ella, que no quería volver a saber de su existencia; y ahora estoy aquí, junto a ella, habiendo almorzado juntas y ahora aconsejándole de forma cariñosa. Como si nada hubiera sucedido.

Y es que es mi culpa, porque yo debería ser firme en mis decisiones y convicciones. Y ahora mismo me estaba haciendo ver como la mujer más fácil del universo, almenos con Daniela Calle.

Gracias.- se limitó a responder sonriendo un poco.- Bueno creo que ya debemos ir avanzando.

Asentí de nuevo sin decir nada más y me puse de pié junto con ella, recogimos todos los documentos que necesitábamos y salimos de su oficina. Caminando hacia la sala de juntas nos topamos con nuestras secretarias, las cuales entraron justo antes que nosotras, disponiéndose a colocarnos un vaso con agua a cada una y sentarse al frente.- Me agrada que sean puntuales, las felicito.- habló la castaña al lado mío como queriendo iniciar una conversación.

Hubiéramos llegado ante pero nos quedamos platicando, una disculpa.- contestó Lucía de forma muy educada.

Descuida.- la tranquilizó.- Bueno creo que es conveniente comentarles antes que inicie la reunión que ustedes serán las organizadoras del evento.- esta vez las mellizas me miraron directamente; seguro una preguntándose como hice para convencer a Calle, y la otra pensando como es que estaba permitiendo eso si yo no quería verla. Lo visible era que estaban sorprendidas.- Poché ya se encargó de separar cupo con todas las empresas que harán parte de ese día, incluídos algunos de nuestros patrocinadores.- al decir eso me lanzó una mirada y movió su cabeza bruscamente varias veces en dirección de las mellizas, haciendo ademán de que les pasara los datos que estaba mencionando. Aguanté una sonrisa y procedí a hacerlo.- Sabemos que estamos dejando esta ceremonia y celebración en las mejores manos, y estamos confiadas en que no nos defraudarán.