DÉJAME CUIDARTE

Más que a nada en el mundo.

Calle POV

Diciembre 2019

Déjame ir a un sitio más calmado.- Le avisé a Juan Carlos a través del celular. Caminé a través de los cubículos de los trabajadores hasta llegar a mi oficina, en donde cerré la puerta con llave para que nadie pudiera interrumpirme.- Listo, ¿Qué me decías?

Que Poché ha estado avanzando mucho estando en París, pero hay algunas cosas que me preocupan y quería comentártelo.- Respiré hondo, tenía que prepararme para lo que iba a oir.- Está llevando una vida bastante desenfrenada.

Define "desenfrenada".- Algo en mi interior ya se sabía la respuesta a eso. Ni modo, era ridículo pensar que Poché podría serle fiel a alguien que ni siquiera conoce.

Parece una adolescente promiscua, no me gusta el rumbo que le está dando a su vida. Ella no era así, ya ni siquiera se preocupa por asistir a la empresa.- Se le escuchaba desesperado, era claro que además de desahogarse, estaba pidiéndome ayuda.- Sé que yo te pedí que siguieras manteniéndote alejada de ella, pero ya no sé qué hacer.

Yo comprendí tus razones, era lo mejor.- Miré a través de las persianas, cuidando que mi encantador novio (nótese el sarcasmo) no estuviera ahí.- Terminaré todos mis pendientes de hoy lo más rápido posible e iré a verte. Pero Juan Carlos- Lo llamé.- Creo que lo más adecuado sería regresarla a New York.

Estoy comenzando a pensar lo mismo, pero me aterra que pueda hacerle daño volver.- Querer mantener a su hija al otro lado del mundo, sin importarle que siguiera quedándose solo, me partía el corazón.- No quiero perderla a ella también.

Eso no pasará, te lo puedo asegurar.- Jamás en la vida dejaría que algo así ocurriera.- Nos vemos más tarde, ¿si?

Correcto.- Se despidió y colgó la llamada, dejándome pensativa.

Aunque no podía negar que sentía una gran emoción por la idea de que Poché regresara, y que pudiera tenerla cerca; me causaba cierto miedo por como podrían presentarse las cosas. Sería bastante difícil tenerla tan cerca y no poder estar con ella.

Pero mierda, ha pasado ya un año. La extraño demasiado.

Me sobresalté a causa del ruido que se originó al tocar la puerta desde afuera. Me apresuré a abrir.- ¿Hay algún requerimien-

Por supuesto que lo hay Daniela, sabes perfectamente que no debes ponerle seguro a la puerta.- Entró rápidamente, inspeccionando la habitación.- ¿Te estuviste revolcando con alguien en esta maldita oficina?- Se acercó a mí bruscamente, tomándome del brazo por la fuerza.

Claro que no, solo necesitaba hacer unas llamadas.- Miré mi brazo, eso dejaría marcas.- Suéltame por favor.

Yo decido cuando soltarte.- Apretó más su agarre, haciéndome quejarme del dolor.- Ya me había parecido extraño que le fueras infiel a tu único amor estúpido.- Me pegó a su cuerpo, tomándome del mentón.- Me muero por ver su cara el día que se entere que ya fuiste mía.- Me soltó de golpe, provocando que lagrimeara. Agaché la cabeza, esperando a que se fuera.- Espero que estés haciendo bien tu trabajo aquí, tu desempeño ayuda a mantener mi nombre en alto.- Se dirigió a la salida, pero recordé lo que tenía que decirle y lo detuve.

Mario.- Lo llamé con temor, haciendo que volteara.- Iré a ver a Juan Carlos después del trabajo.

Okay, me mandas la ubicación exacta del lugar. Y como ya sabes, hay un precio que debes pagar por ese permiso, así que te espero en el apartamento apenas salgas de ahí.- Asentí seria, dejándolo salir del lugar.

...

Toqué la puerta un par de veces, obteniendo respuesta casi de inmediato.- Hola hija.- Amaba ese sentido paternal que siempre tuvo conmigo.

Desde que Juan Carlos regresó a New York y se acordó mamdar a Poché a París, cada cierto tiempo me había encargado de venir a visitarlo para pasar algo de tiempo con él. Estaba solo, y necesitaba compañía. No me importaba tener que cumplir con los "favores" que debía hacerle a Mario por cada vez que pidiera permiso.

Me dejó pasar y me ofreció algo de comer, a lo que acepté.- ¿Cómo haz estado?- Le pregunté.

Un poco mejor, todo sigue pareciendo muy reciente.- Se sentó en frente mío y suspiró.- Extraño tanto a mis niñas.

Lo siento.- Dije después de quedar en silencio unos minutos.

No tienes nada de qué disculparte. No eres culpable, tenlo siempre presente.- Una parte de mí le creía, pero yo inicié la discusión.- Eres una gran mujer. Todo lo que haz hecho por Poché ha sido increíble, y te estaré agradecido eternamente.- Me hizo soltar unas lágrimas. Necesitaba mucho oir aquellas palabras.- ¿De verdad crees que lo mejor sería tarerla de vuelta?

Creo que habría que consultarlo con Haward, pero si no hay ningún problema, sería lo más adecuado.- Respondí.- Ella debe comenzar a vivir su propia vida Juan Carlos.

Solo espero poder servir de apoyo para ella.- Se quedó pensativo.- ¿Y qué hago si menciona a Vale?

No puede saberlo aún.- No estaría lista en quién sabe cuanto tiempo.- No te preocupes, yo me encargaré del resto.

No quiero que se involucren de otra manera Daniela, por favor.- Sería muy difícil. Pero estaría dispuesta a intentarlo.

Descuida, yo no intentaré nada.- Estaba más que segura que haría lo que fuera mejor para ella.

Porque la amo más que a nada en este mundo.

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                                        -ValTe🔥